Luego de más de 24 horas de bloqueos carreteros en el municipio de Nahuatzen, Michoacán, los habitantes quemaron camiones como protesta luego de que el gobierno estatal no atendiera sus demandas de seguridad.

 

Los inconformes acusaron que el gobierno de Silvano Aureoles fue indiferente ante el conflicto entre los pobladores y autoridades municipales en torno a la seguridad en el municipio.

 

Y es que los habitantes argumentan que el presidente municipal Miguel Prado Morales tiene nexos con el crimen organizado, razón por la que esta semana desarmaron a la policía local, y ante la no respuesta de la autoridad estatal, procedieron la noche de miércoles a la quema de dos vehículos, incluido un camión repartidos de refrescos.

 

Los pobladores tienen secuestrados otros 30 vehículos más, entre ellos una pipa de gas que amenazan con incendiar si el gobierno de Silvano Aureoles no responde a sus exigencias.

 

“La voluntad de Nahuatzen hacia el gobierno se acabó y de no ser atendidas nuestras demandas, se van a quemar más vehículos que se tienen retenidos, así como detener y encerrar en la cárcel a los funcionarios y regidores del ayuntamiento”, dijo uno de los representantes de la comunidad.

 

Entre las demandas de los manifestantes está la de que los elementos de seguridad sean propuestos y avalados por la propia comunidad.

 

Exigen que los los policía que estudiaron en la academia recibieran sus uniformes y fueran equipados con patrullas y armas para que los pobladores les tengan confianza en la aplicación de los usos y costumbres de la comunidad.

 

El pasado mes de febrero, el gobierno de Silvano Aureoles aceptó que 57 personas se postularan para ser policía municipales, sin embargo, sólo 11 de ellos superaron las pruebas.

 

El conflicto entre la población y las autoridades municipales tiene al menos 10 meses. En febrero de este año quemaron dos vehículos y retuvieron 20 más. Cabe mencionar que esta región de Michoacán es poblada en su mayoría por indígenas purépechas.