MORELIA. Nuevamente se reportan movilizaciones de comuneros en el municipio de Nahuatzen, donde realizan bloqueos carreteros para exigir a las autoridades estatales se cumplan sus demandas, ya que de lo contrario, amagan con radicalizar sus acciones.
De acuerdo al gobierno del estado, el dialogo sigue y no hay mayores afectaciones aparte de las barricadas, luego de la reunión realizada este miércoles y en la que se acordó tener otra charla este jueves, para abordar los temas de la incorporación de habitantes del municipio a las fuerzas de seguridad, siempre y cuando cumplan con los exámenes de control y confianza.
Los comuneros quemaron ya dos unidades, mientras que no permiten que nadie entre ni salga, al colocarse en las barricadas instaladas.
Luego de que un grupo de comuneros provenientes del municipio de Nahuatzen amenazara con incendiar autobuses en protesta por la falta de respuesta por parte del Ejecutivo para resolver un conflicto post-electoral que derivó en la expulsión de su presidente municipal, el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Ángel Cedillo opinó que el Congreso del Estado sólo puede interferir sí se declarara la desaparición de poderes en dicha demarcación, por lo que corresponde al Gobierno del Estado mantener el diálogo con los quejosos.
En entrevista, el legislador del Sol Azteca afirmó que el Consejo Ciudadano que actualmente se mantiene a cargo de la administración municipal, carece de validez jurídica y por tanto debe prevalecer el diálogo para restaurar al edil expulsado, “incluso para mi gusto podría tratarse de un conflicto post-electoral con tintes de racismo, porque nunca había gobernado un alcalde indígena”, apuntó.
En ese sentido, aseguró que desde el pasado 24 y 30 de diciembre se llevaron a cabo reuniones de la Comisión de Asuntos Indígenas y de Gobierno con el Consejo Ciudadano de Nahuatzen en la que se solicitó que fuese un destacamento del ejército quien se hiciera cargo de la seguridad en la zona, debido a que no se ha completado la transición municipal al acuerdo de Mando Unificado Policial, convenido con la Federación desde hace más de seis años y que sigue sin completarse en Michoacán.
Al cuestionar sobre la posible presencia de grupos armados afines a la delincuencia organizada con el propósito de desestabilizar mayormente la zona, el diputado perredista agregó que se invitó a que tanto ciudadanos como la autoridad provisional presentaran las denuncias correspondientes con el fin de ser investigadas por las autoridades, sin embargo, no se tuvo registro de alguna denuncia formal que confirmara estos hechos.
“Pese a todo sigue siendo un problema de inestabilidad política derivado de conflictos post-electorales y aunque estaremos pendientes del caso, sigue siendo el ejecutivo el encargado directo de atender a las partes involucradas”.