Escenario de infarto. A tres semanas de la segunda vuelta presidencial, la DEA confirmó que la candidata peruana, hija del ex dictador Alberto Fujimori, forma parte de las pesquisas por una millonaria maniobra, revelada por el secretario general de su partido en una grabación oculta

 

La candidata presidencial peruana Keiko Fujimori enfrenta una incómoda investigación a tres semanas de la segunda vuelta electoral que definirá al nuevo presidente de Perú. Se difundió ayer que la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por su sigla en inglés) investiga a Joaquín Ramírez, secretario general de su partido Fuerza Popular.

 

La información fue proporcionada a Univisión y al programa peruano Cuarto Poder por el piloto comercial peruano Jesús F. Vásquez, residente en Estados Unidos, quien grabó para la DEA las conversaciones que tuvo con Joaquín Ramírez en 2013.

 

Según el testigo, en una de las grabaciones Ramírez le dijo que recibió 15 millones de dólares de Keiko Fujimori para financiar su campaña del 2011, que finalmente perdió ante el actual presidente Ollanta Humala.

 

El reportero de Cuarto Poder acudió junto al piloto, identificado como Jesús F. Vásquez, a las oficinas de la DEA, donde una encargada de prensa y un agente confirmaron la investigación, pero declinaron ofrecer mayor información, según mostró el reportaje.

 

Fujimori,  que busca reivindicar a su padre, que purga condena en cárcel por distintos delitos como presidente rechazó “categóricamente” haber entregado dinero al secretario general de su partido, tal como señaló el supuesto testigo.

 

“Tengo que ser suspicaz con esta denuncia… creo que es parte de una guerra sucia, que no es casualidad”, declaró Fujimori a los periodistas desde la región sureña del Cuzco, donde ha cumplido actividades proselitistas durante los últimos días.

 

La candidata dijo que rechaza “este tipo de afirmaciones” y que lamenta que “se den tres semanas antes de las elecciones” del próximo 5 de junio “cuando se supone que (el tema) está siendo investigado desde hace tres años.”

 

Medios locales recordaron que Ramírez también es investigado en Perú por presunto lavado de activos y que existe una solicitud para el levantamiento de su inmunidad parlamentaria por un presunto desbalance patrimonial.

 

Tras la difusión del reportaje, el legislador se comunicó el domingo por teléfono con Cuarto Poder para decir que rechaza “totalmente” las declaraciones del supuesto testigo y anunciar que lo demandará ante la justicia.

 

Por su parte, el candidato presidencial Pedro Pablo Kuczynski, rival de Keiko Fujimori en la segunda vuelta , exigió que el tema sea investigado por las autoridades.

 

“Es indispensable que se aclaren las acusaciones de la DEA que vinculan a Keiko Fujimori y Joaquín Ramírez con lavado de dinero”, escribió en un mensaje en su cuenta en la red social de Twitter. Redacción

 

Paridad

 

Un simulacro de votación difundido el domingo por la empresa privada Ipsos señaló que ambos candidatos mantienen un empate estadístico, al indicar que Fujimori obtiene 44.1% de los votos emitidos, mientras que su rival, el economista de centroderecha Pedro Pablo Kuczynski recibe 43.8%.

 

Resultados primera vuelta

 

33.9%,  Keiko Fujimori

 

20.1%, Pedro Pablo  Kuczynski

 

Ambos buscan convencer a los indecisos que se redujeron del 19% a 14%, según el último sondeo de Datum.