Juan Carlos Contreras Licona, Subsecretario de Información e Inteligencia Policial de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina, quien presuntamente esta madrugada intentó librar a un amigo (señalado como familiar) quien dio positivo en un punto de revisión del Alcoholímetro en la colonia Condesa, negó el hecho.

 

Entrevistado en Noticias MVS, el alto mando policía afirmó que acudió a ese lugar únicamente para supervisar que el protocolo se hubiera aplicado adecuadamente, pero en ningún momento hizo gala de influyentismo o prepotencia.

 

El presunto infractor, Yahir Mendoza Flores, amigo de la facultad del subsecretario, se comunicó con él para informarle que debido a que no le aplicaron correctamente la prueba de alcoholemia dio como resultado 0.46 miligramos de alcohol expirado, lo que traería como consecuencia el arresto.

 

“Llegando al punto me encontré con que la grúa estaba apenas tomando el vehículo y le comenté a los compañeros del alcoholímetro que no lo levantaran que me esperaran que mandaría a traer una célula de asuntos internos para la revisión”, explicó.

 

“En el momento que me comenta la célula de asuntos internos que todo está en orden, voy y como comentario hacia mi amigo, me acerco a la unidad y le comento que tiene 0.46, por lo cual tiene que cumplir con la sanción correspondiente que marque el Juez Cívico”, afirmó Contreras Licona.

 

Sobre los comentarios emitidos por los oficiales encargados del programa Conduce sin alcohol a medios de comunicación, sobre que con su presencia y comportamiento dio muestras de tratar de interceder para beneficiar a su amigo, afirmó que eso carece de sustento.

 

“Ellos todo el tempo hacen referencia a la unidad (vehículo), jamás comentan algún tema que viera con mi amigo que no cumpliese, de hecho ellos hacen esos comentarios y lo que vemos es que se cumple a cabal cumplimiento la ley no hay mayor importancia él está ahorita cumpliendo su sentencia”, subrayó.

 

Por último, el funcionario reiteró que Yahir Mendoza Flores fue trasladado al Centro de Sanciones Administrativas, mejor conocido como El Torito, luego de que personal de asuntos internos de la SSP-CDMX corroboró la correcta aplicación de la prueba de alcoholemia.