Por segundo día consecutivo, la Comisión Ambiental de la Megalópolis activó la fase de precontingencia ambiental atmosférica por ozono en la Zona Metropolitana, debido a que un sistema de alta presión en el centro del país provocó un estancamiento de contaminantes.

 

Además, la intensa radiación causó un aumento en la actividad fotoquímica, por la presencia de vientos débiles, lo que evitó que la dispersión del esmog.

 

La comisión informó, mediante un comunicado de medios, que aunque por las mañanas la calidad del aire es buena, durante la época invernal se pueden presentar altos niveles de partículas suspendidas de ozono.

 

Por tal razón, se declaró fase de precontingencia, una acción preventiva que tiene el propósito de contribuir a la reducción en la emisión de los contaminantes precursores de ozono.

 

Los riesgos asociados a las altas concentraciones del contaminante son irritación en vía respiratorias, molestias graves en personas con problemas respiratorios y cardiovasculares y riesgo de activación de ataques de asma en personas asmáticas.

 

A causa de este pronóstico, las autoridades de tránsito y vialidad establecerán operativos para la agilización vehicular en la Zona Metropolitana del Valle de México.

 

Las autoridades ambientales incrementarán la vigilancia del Programa de Vehículos Contaminantes en la Zona Metropolitana y se suspenderán las actividades de pintura de vehículos en la vía pública, mobiliario y equipos a cielo abierto, así como en instalaciones sin casetas de pintura.

 

También quedarán suspendidas las actividades de abastecimiento de combustibles en estaciones de servicio que no cuenten con sistemas de recuperación de vapores o que éstos no operen adecuadamente.

 

Las dependencias y entidades de la administración pública local, deberán intensificar la vigilancia para evitar incendios en áreas boscosas, agrícolas y urbanas y reforzar el combate de incendios activos.

 

En este sentido, la Comisión Ambiental de la Megalópolis lanzó un llamado para reportar cualquier incendio y prohibió la quema de cualquier tipo de material, residuo sólido o líquido a cielo abierto y en chimeneas domésticas.