La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó hoy los hechos de violencia ocurridos el pasado 11 de febrero en el penal de Topo Chico, que se saldaron con 49 muertos y 12 heridos, al tiempo que pidió al gobierno investigue con diligencia el suceso.

 

En un comunicado, la CIDH urgió al gobierno federal a investigar y esclarecer las circunstancias en que ocurrieron esos hechos, así como a identificar y sancionar a los responsables.

 

Según la versión oficial, el motín se inició por el enfrentamiento entre integrantes de Los Zetas.

 

La CIDH, al constatar que la violencia tuvo lugar en un contexto de hacinamiento, urgió a México a que tome medidas para mejorar esta situación y aplicar alternativas a la prisión preventiva.

 

Asimismo, la Comisión recordó al Estado su obligación de investigar de oficio y con la debida diligencia todas aquellas muertes de personas que se encuentran bajo su custodia.

 

“Estas investigaciones no solo deben estar orientadas a establecer los responsables materiales de los hechos, sino también a los posibles autores intelectuales y a aquellas autoridades que pudieran ser responsables por acción u omisión”, subraya la CIDH.

 

La Comisión es un órgano autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), con sede en Washington.