NUEVA YORK. Dos meses antes de su primer viaje a Estados Unidos, la tasa de aprobación del papa Francisco entre los estadunidenses ha bajado, debido particularmente a una declinación entre los conservadores y los católicos, según una encuesta de Gallup difundida el miércoles.

 

El 59% de los consultados este mes dijo que tenían una opinión favorable sobre el pontífice en comparación con el 76% en 2014, según la consulta. El porcentaje de estadunidenses que desaprueban al papa aumentó del 9% al 16% en el mismo período. Los cambios fueron más pronunciados entre los conservadores, cuya opinión sobre Francisco bajó 27 puntos al 45%. Entre los católicos, esa misma tasa bajó 18 puntos al 71%.

 

La encuesta fue realizada entre el 8 y el 12 de julio, tres semanas después que el papa difundió su documento en el que proclama que el cambio climático se debe principalmente a los seres humanos y censura un sistema económico que a su juicio agrava el calentamiento global y explota a los pobres. La consulta a más de 1.000 adultos tiene un margen de error del 4 puntos porcentuales.

 

Mientras se tomaba la encuesta, Francisco, el primer pontífice latinoamericano, efectuaba una gira por tres países sudamericanos que incomodó a los conservadores.

 

En su discurso del 9 de julio en Bolivia —que el religioso Jim Martin, editor de la revista jesuita América, calificó el más revolucionario de Francisco hasta ahora_, el papa reclamó una reforma radical de la economía mundial y solidaridad con los pobres, y afirmó que el derecho al trabajo, la vivienda y la tierra son “sagrados”.

 

Mark Gray, director de encuestas en el Centro de Investigación Aplicada en el Apostolado, en la Universidad de Georgetown, dijo que la encuesta refleja que “muchos católicos estadunidenses están afiliados más íntimamente con su partido político que con su fe”. Varios católicos que aspiran a la candidatura presidencial republicana han criticado al papa o se han distanciado de él por su papel en el deshielo en las relaciones de Estados Unidos con Cuba y en su insistencia en que un capitalismo desenfrenado ha perjudicado a los más pobres y más vulnerables.

 

Los conservadores católicos han manifestado su desconformidad con el estilo y énfasis del papa. Carl Olson, editor del Catholic World Report, órgano conservador, escribió la semana pasada que aunque coincidía con las críticas papales al consumismo y a una dependencia exagerada de la tecnología para solucionar los problemas de la sociedad, halló un cierto “desgaste” en algunos católicos por el tono papal que describió como prepotente.