El Partido de la Revolución Democrática en el Distrito Federal (PRD-DF) asume que la pérdida de espacios ante el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) no fue por voto de castigo, sino por una presunta traición interna y por una “operación silenciosa” de programas sociales.

 

Tras la debacle perredista en la capital han salido a relucir, al interior del sol azteca, dos nombres: René Bejarano, líder de la corriente perredista Izquierda Democrática Nacional (IDN), y Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Desarrollo Social del Gobierno del Distrito Federal.

 

El primero porque durante el proceso de elección interna de candidatos en febrero pasado, su tribu sufrió una fractura y quedó disminuida, por lo que –resentido- señaló directamente al jefe de Gobierno capitalino,  Miguel Ángel Mancera, de incidir en la vida del PRD.

 

La segunda porque, a decir del derrotado candidato a diputado local por Cuauhtémoc, Roberto López, “operó a favor de Morena” con los programas sociales de Adultos Mayores y el de Prepa Sí. “Hubo una intervención directa por parte de la Secretaría de Desarrollo Social”, acusó ayer.

 

Los resultados electorales adversos obligaron al PRD a pensar en su reestructuración a medio sexenio de la administración de Mancera y, en ese sentido, Raúl Flores, líder del sol azteca en la capital, advirtió que prepara una purga de tribus.

 

Abundan clanes

 

El PRD es quizá el partido que más expresiones tiene en su interior; actualmente son ocho las tribus que conforman al perredismo, aunque previo a la renuncia de Marcelo Ebrard eran nueve, ya que el ex jefe de Gobierno lideraba el llamado Movimiento Progresista, misma que se mudó al Partido Movimiento Ciudadano.

 

La corriente dominante es la Nueva Izquierda, también conocida como Los Chuchos¸ que lideran Jesús Ortega, actual delegado del CEN del PRD en el Distrito Federal, y Jesús Zambrano, delegado especial del CEN en Michoacán.

 

A esa corriente pertenece también el actual líder del PRD, Carlos Navarrete, quien ha reconocido que el PRD se enfila a perder el control político de la Ciudad de México en 2018.

 

La segunda corriente del PRD es la de Bejarano, hoy reducida por la fuga de varios de sus principales cuadros, como Leonel Luna, en Álvaro Obregón; Leticia, Quezada, en Magdalena Contreras, y Alejandro Fernández, en Cuauhtémoc.

 

La tercera corriente acuñada en el Distrito Federal es el Movimiento de Equidad Social de Izquierda (MESI), que controla Dione Anguiano, hoy virtual candidata electa en la delegación Iztapalapa.

 

Le sigue Alternativa Democrática Nacional (ADN), conformada principalmente por perredistas del Estado de México y liderada por el actual secretario general del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, Héctor Bautista.

 

Pierden en zonas bejaranistas

 

En el PRD asumen que el golpe pudo venir de René Bejarano, pues aunado a que éste quedó resentido por el debilitamiento de su corriente, el sol azteca perdió en sus zonas de influencia.

 

Es el caso de Azcapotzalco, donde Pablo Moctezuma, de Morena, se impuso a Antonio Padierna, hermano de Dolores Padierna, esposa de Bejarano; también destaca Cuauhtémoc, donde el PRD perdió hasta los distritos locales, uno de los cuales buscó su ex simpatizante Alejandro Fernández.

 

También Magdalena Contreras, donde Leticia Quezada no sólo perdió el distrito por el que contendió, sino que su delfín, Beatriz Ramos no pudo retener la jefatura delegacional y la perdió ante Fernando Mercado, del PRI.

 

IDN, de Bejarano, una tribu acotada

 

La Izquierda Democrática Nacional (IDN), que comanda René Bejarano, ya no es la tribu dominante que se repartía la mayoría de las candidaturas y tomaba las decisiones  al interior del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

 

Desde febrero pasado, la corriente de Bejarano sufrió una abolladura que, dijo él mismo, se fraguó en la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal de Miguel Ángel Mancera Espinosa y en la Secretaría de Gobierno de Héctor Serrano.

 

Los números muestran que la fractura en la IDN fue del 57%; en el Consejo Nacional del PRD, celebrado en septiembre de 2014, esta corriente obtuvo 116 mil 184 votos que representaron el 27% del total.

 

Sin embargo, tras el proceso de elección interna del PRD en el Distrito Federal, celebrado en febrero pasado, esa cifra bajó a 49 mil 472 votos, lo cual significa que perdió más de la mitad, con 66 mil 712 votos.

 

Lo anterior tras la salida de sus equipos delegaciones en Cuauhtémoc, con Alejandro Fernández; en Álvaro Obregón, con Leonel Luna; Magdalena Contreras, con Leticia Quezada y algunos cuadros en Tlalpan.

 

Actualmente la fuerza territorial de IDN representa el 9.68% del Distrito Federal y recae en referentes de esa tribu que buscaron un cargo de elección por otro partido.

 

Destaca el caso de Leticia Varela, quien buscó una diputación por el distrito 16 local por el Movimiento Ciudadano en Benito Juárez; en Tláhuac, en la figura de Guadalupe Flores, candidata del mismo partido a la Jefatura Delegacional y Francisco Alvarado, candidato también del partido naranja a la Gustavo A. Madero.

 

En dichos territorios la votación para el PRD fue adversa, ya que en Benito Juárez, la aspirante Dinorah Pizano, identificada con IDN, se fue a la tercera posición, por debajo de Morena.

 

En Tláhuac el PRD perdió la Jefatura Delegacional ante Morena y en Gustavo A. Madero el triunfo del PRD sobre Morena fue de apenas dos mil votos y el sol azteca perdió todos los distritos locales excepto el 1, que se llevó Nora Arias.

 

En el Consejo Nacional de septiembre, Nueva Izquierda, de Los Chuchos, consiguió 190 mil 202 votos, que representaron el 37% del total, y se consolidó como la tribu dominante en el sol azteca.