Diversas organizaciones sociales por los derechos humanos denunciaron que la salud de Nestora Salgado García, comandante de la policía comunitaria de Olinalá, Guerrero, está gravemente deteriorada tras 10 días de huelga de hambre dentro del penal federal de máxima seguridad de Tepic, Nayarit.

 

El abogado de Nestora, Leonel Rivero, indicó ayer en conferencia de prensa que la falta de alimento ha empeorado algunas enfermedades que su cliente padecía, además de que no recibe atención médica.

 

“Ella tiene neuropatía crónica, adormecimiento de extremidades y la terapia no se le está siendo suministrada en el Cefereso y diario tiene dolores en la columna y la falta de alimento le imposibilita sus actividades”, detalló.

 

“Es evidente que la huelga de hambre le está provocando problemas de descompensación física de Nestora ya que presenta mareos y con poca movilidad de su cuerpo”, agregó.