La decisión de dejar sin validez el fallo de la primera licitación del tren México-Querétaro fue acordada verbalmente por el Presidente de la República y el titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), sin que quedara plasmada en un documento oficial.

 

De acuerdo con un comunicado de la SCT, el pasado 6 de noviembre el titular de la dependencia, Gerardo Ruiz Esparza, propuso al jefe del Ejecutivo Federal dejar sin efecto el fallo de la licitación, dado a conocer tres días antes, ante lo cual el Presidente manifestó su conformidad.

 

“En virtud de que lo anterior se llevó a cabo en forma presencial, no existe documento en el que se haya hecho constar lo anteriormente referido”, indicó la SCT como respuesta al Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI), que un día antes pidió dar a conocer el documento sobre la instrucción presidencial para cancelar la concesión del tren de alta velocidad otorgada a un consorcio encabezado por China Railway.

 

Aunque la SCT no subraya el fundamento legal al que se apegó la decisión, Ruiz Esparza mencionó en meses anteriores que se basó en el artículo 40 de la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las Mismas, el cual permite cancelar una concesión “por caso fortuito, fuerza mayor, existan circunstancias justificadas que provoquen la extinción de la necesidad de contratar los trabajos, o que de continuarse con el procedimiento de contratación se pudiera ocasionar un daño o perjuicio a la propia dependencia o entidad”.