Se llegó la noche más oscura para Chivas, la misma que el más apasionado seguidor rojiblanco temió: Guadalajara es, por primera vez en su historia, el último lugar de la tabla del descenso. Pero eso no es lo peor, sino lo que viene, porque el equipo de José Manuel de la Torre enfrenta un calendario muy duro en este arranque de torneo.

 

Y es que peor no pudo arrancar  para el chiverío, con derrota en la selva del jaguar, mientras que sus rivales directos en la lucha por no quemarse salieron airosos de sus respectivos compromisos. Veracruz viajó a Torreón y le tundió a Santos, Puebla, fuera del Cuauhtémoc y en estadio prestado, le pegó a Tijuana y U de G atendió al Monterrey en el Jalisco. ¿Y Chivas? Chivas no cambia, o mejor dicho aún, en Chivas nada cambia.

 

Los problemas en el rebaño conforme pasan los meses se multiplican. Apenas el viernes pasado, un escándalo más.  Ahora fue echado el director administrativo del club, Julio Reyes, sin explicación alguna de por medio dada por el dueño del club, Jorge Vergara o su esposa Angélica Fuentes. No es todo.

 

Guadalajara llegó a Chiapas para medirse a Jaguares con carro completo y ¡oh sorpresa! De buenas a primeras: Erik El Cubo Torres, flamante refuerzo para la delantera rojiblanca llegado desde la MLS, y Fernando Arce, nada menos que uno de los mejores hombres del rebaño durante el torneo de Apertura 2014, fueron cepillados a última hora y de mala manera por el técnico José Manuel de la Torre para el duelo ante los chiapanecos. Ambos futbolistas tuvieron que jugar con la Sub-20, ante el asombro del resto del grupo de elementos rojiblancos.

 

A cambio, El Chepo de la Torre debutó, durante la derrota ante los chiapanecos, a un chico de nombre Raúl López. La referencia no es porque el chamaco sea malo, pero en la situación que enmarca a Chivas, asombra el darle la responsabilidad a un chico que no había jugado ni un minuto en Primera División, cuando en la baraja existían recursos como los del recién llegado Torres y del probado Arce.

 

Lo peor, que en plena quema, ahora sí, Jorge Vergara, clama por el apoyo de su afición: “Es momento de apoyar al equipo porque los jugadores necesitan muchos aplausos y mucho respaldo para lograr el resultado. El apoyo de la afición tiene que ser incondicional”. Como sea, el presente dice que Chivas es último porcentual ¿Culpa de Vergara, técnicos o jugadores? Lo cierto es que Chivas vive su noche más oscura. ¿Dónde está el campeonísimo, el mexicanísimo?… Muy cerca de la quema en la división inferior.