GINEBRA. Michael Brown, padre del joven afroamericano quien murió luego de ser abatido con varios disparos por un policía anglosajón en Ferguson, clamó en el seno de Naciones Unidas que se haga justicia por el asesinato de su hijo.

 

“Venimos a buscar justicia para mi hijo”, dijo Brown en un encuentro con periodistas en Ginebra en el marco de la revisión del informe de Estados Unidos por los expertos del Comité de Naciones Unidas contra la Tortura.

 

“Queremos un juicio justo para el que cometió este crimen y que sea acusado”, dijo Daryl Parks el abogado que representa a la familia Brown.

 

Michael Brown, de 18 años, fue ultimado por media docena de disparos del arma del policía Darren Wilson. El policía justificó su reacción bajo el argumento de que iba a ser embestido por el joven, de 1.92 metros y 132 kilogramos de peso.

 

Sin embargo, según testigos el joven estaba con las manos en alto cuando recibió los disparos.

 

El abogado afirmó que impulsarán la creación de un “plan nacional sobre justicia racial” e indicó que presentaron el caso ante el Comité contra la Tortura de la ONU en una reunión privada porque la muerte del joven era un ejemplo del “excesivo uso de la fuerza” por parte de los cuerpos de seguridad estadounidenses.

 

Parks explicó que lo que quieren los padres del joven asesinado es que además de hacerse justicia, esto no se vuelva a repetir en el futuro.

 

Se espera que en los próximos días el jurado investigador anuncie su decisión sobre el caso.

 

“Todas las vidas importan y una vida negra también importa”, subrayó Parks. DE