En su Segundo Informe de Gobierno el presidente Enrique Peña Nieto dio a conocer a la nación importantes acciones de su gobierno para avanzar en la transformación de México. Una de ellas, a la cual otorgó especial énfasis por la trascendencia en la aplicación de su política social de nueva generación es la trasformación del Programa Oportunidades en Prospera.
Oportunidades es actualmente el programa social más importante del gobierno federal con un padrón de 6.1 millones de familias y un presupuesto de más de 73 mil millones de pesos. Su objetivo es contribuir a la ruptura del ciclo intergeneracional de la pobreza a través de la formación de capacidades de las familias beneficiarias.
¿Por qué transformar Oportunidades, un programa bien calificado a nivel internacional y cuyo modelo se replica en más de 30 países?
Tres son las razones fundamentales:
- Primero, porque a pesar de la creciente cantidad de recursos invertidos en esta política pública desde 1997, cuando fue creado como Progresa, y en general en gasto social, los niveles de pobreza hoy son similares a los de hace 20 años.
- Segundo, el capital humano generado en este lapso ha tenido limitadas posibilidades de insertarse en los mercados laborales y los sectores productivos ante un lento crecimiento económico.
- Tercero, no están claros los mecanismos para que las familias dejen el programa una vez lograda la modificación en sus niveles de bienestar, llevándolas así a depender de forma casi permanente de los apoyos monetarios.
La revisión a fondo del Programa Oportunidades derivó en la necesidad de rediseñarlo y hacerlo crecer, cumpliendo así el compromiso presidencial de impulsar programas sociales de nueva generación. Su transformación en Prospera no es un simple cambio de nombre, es una transformación de fondo en sus instrumentos, visión y alcances.
Prospera se crea con el objetivo de lograr más y mejor desarrollo humano para conectarlo con las necesidades del mercado laboral y generar nuevas oportunidades de empleo, salarios e ingresos; busca crear “salidas” a la pobreza y romper su transmisión intergeneracional.
¿Cuáles son los principales cambios?
En materia de educación, a los apoyos ya existentes se suma el otorgamiento de becas anuales de educación superior.
En materia de salud se amplía el Catálogo Universal de Servicios y se promueve la afiliación a la seguridad social.
En materia de alimentación se brinda acceso a leche Liconsa.
Prospera promueve la inclusión financiera y social, la inclusión productiva y la inclusión al empleo y la formalidad con seguridad social, además reconoce el derecho de audiencia, el cual podrá ser ejercido por los beneficiarios ante una suspensión de apoyos por tiempo indefinido o de manera definitiva. Se trata de hacer valer los derechos de la gente.
Prospera amplía la coordinación interinstitucional a recursos, acciones y políticas públicas de diferentes dependencias del gobierno federal para generar los avances y las salidas productivas de las familias beneficiarias.
El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto no tenía por qué esperar una solución del mercado a la cuestión de la inclusión social y productiva de los más pobres. Por ello ha ejercido una acción de gobierno con una firme visión social arribando a Prospera.
Prospera se crea en un entorno donde se espera que la economía crezca de manera sostenida gracias a las reformas estructurales, aprobadas en un proceso de diálogo y consensos con el conjunto de las fuerzas políticas, las cuales ponen por delante el bienestar y la prosperidad de los mexicanos.
Prospera se inscribe en el marco de la Política Social de Nueva Generación, la cual está enfocada en alcanzar una sociedad de derechos ciudadanos y humanos plenos. Prospera cambia los incentivos: introduce un carácter más participativo, transita de la política asistencialista a la productividad de las personas, a su dignidad y empoderamiento. Como dice el presidente Peña Nieto, “se facilita a las familias mexicanas crecer económicamente y hacerse camino por sí mismas”.
Prospera evoluciona atendiendo las recomendaciones derivadas de evaluaciones de investigadores y académicos, cumple sobre todo con las demandas y aspiraciones de las familias beneficiarias para dejar de ser rehenes de los subsidios y las ayudas públicas, pasando en cambio a contar con la posibilidad de ejercer sus derechos y participar con carácter de protagonistas en su propia superación.
Al establecer para su gobierno una Política Social de Nueva Generación, donde el destino de millones de mexicanos trascienda de los programas asistenciales hacia la inclusión social, productiva y financiera, el presidente Enrique Peña Nieto cumple moviendo a México.
(*) Jefe de la Oficina de la Secretaria y Comunicación Social de la Secretaría de Desarrollo Social