Como en el Olímpico de Roma hace 24 años, una Argentina vestida de azul perdió el título del mundo contra Alemania. El futbol está a mano con su historia, el mejor de Brasil 2014, el equipo que mejor juego desplegó durante todo el torneo se llevó la copa.

 

Una generación madura y consolidada, los dirigidos por Joaquin Loew resintieron el agobio argentino de los primeros minutos, esperaron atrás y dejaron que Messi y compañía se descastaran, agotados, los sudamericanos apostaron desde los minutos finales del partido por los penales,  pero no contaron con un chico de 22 años metiera el gol de su vida para darle a su selección la cuarta copa del mundo. 

 

 

Como Andrés Iniesta en  Johaesburgo en tiempo extra, ahora fue Mario Goezte quien controló un balón con el pecho y antes de que cayera la empalmó para vencer a Romero y poner el 1-0 a los 113 minutos de tiempo corrido.

 

Gol que vale un campeonato del mundo 

 

 

 

 

El cansancio en Argentina era obvio, era Alemania quien establecía condiciones, se jugaba al ritmo que querían los germanos, parecía ser que desde el final del primer tiempo extra los sudamericanos firmaban el empate.    

 

Andre Schuerrle tuvo el gol apenas al inicio de la prórroga, pero atrás apareció Romero para meterle ambas manos al balón y evitar que  Alemania se fuera al frente.  

 

 

 Romero salva a Argentina 

 

 

   

 

 

Para la segunda mitad, Argentina se desinfló, el físico ya no les daba, corrieron todo el primer tiempo y aunque Sabella hizo cambios, Alemania empezó a dominar aunque de tres cuartos de cancha para enfrente no tuvo claridad.

 

El balón fue para el Pipa, llegó mano a mano contra Neuer que se lanzó con todo sobre la el delantero argentino, con la rodilla por delante el arquero lo  derribó en el área  pero el silbante italiano ni falta marcó.

 

 

Neuer atropelló al Pipa

 

 

      

 

 

Para los primeros 15 minutos del segundo tiempo, Argentina ya no de defendía tan bien como lo hizo durante todo el primer tiempo, los germanos comenzaron a encontrar espacios gracias en gran parte a Bastian Schweinsteiger.    

 

 

El segundo tiempo siguió en la mismo nivel que el primero, con Argentina dominando, Leo Messi llegó al área con balón controlado, tenía en sus pies la consagración pero su disparó se fue apenas desviado del arco de Neuer.    

 

 

El tiro de Messi 

 

   

 

 

Un gran primer tiempo, vertiginoso, digno de una final de Copa del Mundo, cuando Argentina y Messi salen en el papel de víctimas  o de no favoritos, es cuando mejores partidos dan, y este no fue la excepción, los dirigidos por Sabella fueron mejores que los germanos en los primeros 45 minutos.  

 

Era el tiempo agregado del primer tiempo, un córner a favor del equipo alemán cuando  llegó el milagro, el remate de Benedikt Howedes dio en el palo izquierdo de la portería de Sergio Romero, después llegó Thomas Muller para rematar pero estaba en fuera de lugar.

 

Se salvó Argentina 

 

   

 

 

Los detractores decían que Messi no había aparecido en todo el Mundial, pero hoy en compañía de Lavezzi e Higuaín tuvieron  contra las cuerdas a Alemania, en  40 minutos llegaron cuatro veces de frente al arco pero no concretaron.

   

Apareció el genio 

 

   

 

 

El estadio explotó, la mayoría argentina que copaba las gradas del Maracaná festejó el gol del Pipa Higuaín, en un centro perfecto de Ezequiel Lavezzi llegó el delantero y definió para el 1-0 pero el árbitro asistente marcó fuera de lugar. 

 

Gol anulado 

 

 

      

 

Corría el minuto 20 del primer tiempo cuando Toni Kroos le regaló un balón a Gonzalo Higuaín, de frente y sin marca el delantero del Napoli se perdió el  gol más fácil del su  vida, era el 1-0 hasta ese momento fue la más clara del partido.  

 

Era el 1-0 

 

     

 


Tras los primeros  15 minutos Alemania empezó a equilibrar el trámite del juego, y es que los dirigidos por Sabella comenzaron con un ritmo vertiginoso.

 

 

Argentina comenzó pisando el área teutona, Messi y Lavezzi son los más rápidos, les han dejado muchos espacios, los primeros 10 minutos de la final fueron muy agradables.

 

 

Todo listo en Maracaná para conocer al nuevo campeón del mundo, Alemania y Argentina se miden una vez más en el partido más importante, como en el Azteca en 1986  y en el Olímpico de Roma en 1990. La primera vez, Diego Armando Maradona y 10 más se llevaron la copa, cuatro años después, Lothar Matthaus y compañía vencieron a los pamperos.

 

Esta vez Alemania viene con un envión anímico espectacular, después de propinarle una goleada colosal a Brasil en semifinales, desplegando un futbol exquisito, preciso y funcional.

 

El camino a la final no fue fácil, abrió con goleada contra un endeble Portugal, después tuvo complicaciones para empatarle a Ghana y cerró la fase de grupos con un triunfo sobre Estados Unidos, que en los últimos 20 minutos exhibió a los germanos.

 

Para octavos de final, sufrió demás contra una voluntariosa Argelia, el equipo de Low se vio obligado a llegar a tiempo extra para definir el juego. Para cuartos de final, Manuel Neuer salvó un tiro de Karim Benzema en la parte final del encuentro para darle el pase a semifinales. Presas del calor ese partido de cuartos contra Francia, quedó a deber a los espectadores.

 

En la antesala de la final, borró de la cancha a un pálido Brasil, ni las manos metieron los locales, en media hora hicieron historia.

 

Argentina por su parte, de la mano de  Leo Messi y Javier Mascherano han llegado a una final 24 años después.

 

Iniciaron el camino con muchas dudas, Sabella corrigió al medio tiempo del partido contra Bosnia y lo terminó ganando, siguió una muralla iraní que en un contragolpe casi les gana pero de nuevo, el enano frotó la lámpara y les dio el triunfo. Cerró lo frase de grupos con un triunfo sobre Nigeria.

 

Para octavos de final, otra vez Messi acompañado de Ángel Di María echaron de la Copa del Mundo a Suiza; ya en cuartos Bélgica los arrinconó en su área los últimos 20  minutos pero los pamperos sortearon bien el escollo.

 

En el parido de semifinal contra Holanda, supieron contener bien a Arjen Robben, Javier Mascherano le quitó un gol en tiempo de compensación para llevar a la Albiceleste de nuevo a una final de Mundial.

 

escuadras_final