La policía brasileña dispersó hoy con gases lacrimógenos y bombas aturdidoras a cerca de 100 manifestantes que participaron en una protesta contra el Mundial de futbol Brasil 2014 en la ciudad de Salvador, en coincidencia con el partido España-Holanda.

 

Los manifestantes, varios enmascarados y vestidos de negro, se concentraron en la plaza de Campo Grande a la misma hora en que comenzó el partido en el estadio Fonte Nova.

 

Los manifestantes, que criticaron los elevados gastos del gobierno en el Mundial y entonaron cánticos contra la FIFA, decidieron marchar por el llamado Corredor de la Victoria en dirección al lugar en que la FIFA montó su “Fan Fest”, como son conocidos los locales de concentración para los aficionados.

 

La policía lanzó gases lacrimógenos y bombas aturdidoras contra el pequeño grupo luego de que los participantes en la protesta se negaran a retirarse.

 

Antes de dispersarse, los manifestantes respondieron con piedras y atacaron algunos comercios, entre los cuales un concesionario de vehículos que sufrió varios daños.

 

Según versiones de prensa, la policía detuvo a trece de los manifestantes a los que acusó de actos de vandalismo.

 

Seis reporteros han resultado heridos tras las protestas 

 

Seis reporteros resultaron heridos el jueves, cinco de ellos por la policía, durante las protestas que tuvieron lugar en varias ciudades de Brasil contra el Mundial de futbol Brasil 2014, que comenzó ayer en Sao Paulo, informó la  Asociación Brasileña de Periodismo de Investigación (Abraji).

 

En la manifestación de Sao Paulo resultaron heridas las profesionales de la red de televisión CNN, Barbara Arvanitidis y Shasta Darlington; la freelance Michelle Spgea; el periodista argentino Rodrigo Abd, de la agencia de noticias Associated Press, y el asistente de cámara de la red brasileña SBT, Douglas Barbieri.

 

En Belo Horizonte, otra de las sedes mundialistas, el fotógrafo Sergio Moraes, de la agencia Reuters, sufrió un contusión leve en el cráneo tras ser golpeado en la cabeza por un objeto mientras cubría una manifestación.

 

Tras los incidentes, Abraji condenó “el uso excesivo de la fuerza” por parte de la policía e informó que desde mayo del pasado año 177 periodistas resultaron heridos durante sus respectivas coberturas.

 

La manifestación en Salvador fue prácticamente la única en todo Brasil en el segundo día del Mundial.

 



La víspera hubo protestas en al menos seis ciudades, que coincidieron con el partido inaugural entre Brasil y Croacia. Por ahora, no tienen previstas nuevas concentraciones.

 

Las manifestaciones del jueves confirmaron la expectativa del Gobierno de que las protestas contra el Mundial serán menores a las multitudinarias registradas el año pasado en Brasil, cuando cientos de miles de personas salieron a las calles para exigir mejores servicios públicos.