CUIABÁ, Brasil.-En Cuiabá, una de las doce sedes del Mundial, se respira futbol… americano. Este deporte pasión en Estados Unidos tiene en la capital de Mato Grosso, en el centro norte de Brasil, más popularidad que el futbol, que tiene un equipo en la tercera división del Campeonato Brasileño.

 

Miles de personas en una ciudad de 800 mil habitantes siguen el futbol americano y al bicampeón brasileño, el Cuiabá Arsenal, aunque el campeón actual es el Curitiba Crocodiles, del estado sureño de Paraná, donde este deportes es minoría respecto del futbol.

 

Es irónico pero el Mundial 2014 puede tornar al flamante estadio Arena Pantanal en escenario para masificar el futbol americano.

 

“Para los jugadores será una experiencia fantástica y sueñan con eso”, dijo a Efe el presidente del Cuiabá Arsenal, Orlando Ferreira.

 

Se calcula que la afición pueda aumentar hasta los 20 mil espectadores con el nuevo estadio, donde pretende jugar este equipo creado hace ocho años por seis amigos y que cuenta con varios de sus jugadores en la selección brasileña de futbol americano.

 

Las escuelas de futbol americano en Cuiabá y el municipio vecino de Varzea Grande “están bien estructuradas y a los niños les gusta mucha veces más que el futbol”, dijo a EFE Andrei Vargas, defensor de la selección brasileña que ganó en mayo a la de Uruguay por 40-0.

 

Aunque su nivel está muy lejos de la NFL, jugadores de Mato Grosso prueban suerte en torneos estudiantiles de Estados Unidos.

 

El equipo usa prácticas del rugby, como acciones sociales en sus escuelas para niñas y niños de Cuiabá y Varzea Grande, que juegan en la modalidad Flag, que evita las acciones violentas de contacto.

 

“La relación con el hincha es fundamental para mantener el equipo”, explicó el presidente del Cuiabá Arsenal.

 

Durante el Mundial, Cuiabá recibirá el 13 de junio el partido de Chile y Australia. El día 17 se medirán Rusia y Corea del Sur. El 21 Nigeria y Bosnia, y el 24 de junio cerrarán Japón y Colombia.

 

El Arena Pantanal tiene capacidad para 42 mil personas y muchos temen que después de esos partidos se vuelva un ‘elefante blanco’, como es el temor con otros estadios construidos en zonas no futboleras, como Manaos.

 

Cuando Cuiabá fue incluida como sede del Mundial, se creyó que un equipo podría llegar a la Primera División, pero la previsión falló y el equipo mejor calificado del área es el Luverdense, está en la B, aunque está situado a 350 kilómetros de la capital.

 

“Nunca me gustó el futbol, me pareció que el rugby primero y el futbol americano después tienen más complejidad, más estrategia”, dijo a Efe el jugador de futbol americano Andrei Vargas.

 

Vargas sueña con jugar un Mundial pero, a diferencia de la mayoría de los habitantes del ‘país del futbol’, quiere el Suecia, donde se jugará el Mundial, pero de futbol americano.

 

Fue en Suecia, pero en 1958, donde Brasil alzó el primero de sus cinco títulos mundiales en el futbol.