Los capitalinos que abandonen sus mascotas se harán acreedores a multas de hasta mil 600 pesos, con las reformas a los artículos de la Ley a Protección de Animales que aprobó la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).

 

La madrugada del jueves fueron aprobadas reformas que reforzarán la Ley de Protección a Animales, incluido el registro obligatorio, la tenencia responsable, así como la regulación de venta de animales domésticos.

 

Con ello los capitalinos estarán obligados a registrar a sus mascotas.

 

El diputado del PAN, Orlando Anaya, impulsor de la propuesta, explicó que en una primera etapa, las personas beneficiarias de programas sociales en el DF que tengan mascotas, estarán obligadas a registrar a éstas.

 

A partir de que se publiquen las reformas en la Gaceta Oficial, los capitalinos tendrán que registrar a sus perros o gatos, y otros animales.

 

La tenencia responsable de mascotas incluye además el implante de un microchip con datos como el nombre del dueño y del animal, domicilio, si está esterilizado y su historial de vacunación.

El registro, que se realizará a través de Locatel, contribuirá a abatir el maltrato animal y el abandono de mascotas en la vía pública.

 

En caso de que las mascotas fuesen abandonadas, a los responsables de ellas se les impondrá una multa de hasta 25 salarios mínimos.

 

El también integrante de la Comisión Salud en la ALDF explicó que al promover una cultura de tenencia responsable, se podrá abordar una problemática de abandono y sobrepoblación de mascotas en la capital, como consecuencia de la insensibilidad, la irresponsabilidad y falta de esa cultura.

 

“Se sancionará con mayor severidad a las personas que decidan o tengan un animal de compañía que no asuman la responsabilidad que implica sus cuidados, así como a los establecimientos mercantiles que no cumplan con la normatividad establecida para el control, cuidado y protección de la vida de los animales de compañía”, dijo.

 

Cabe señalar que la Secretaría de Salud del DF, en 2012, calculó que había un perro por cada siete personas, es decir, 1.2 millones de canes, de los cuales 120 mil se encontraban en situación de calle, ocasionando graves problemas sanitarios en nuestra capital.