SANTIAGO.  Desde que asumió el mando de Chile, Jorge Sampaoli transformó un plantel indisciplinado, que marchaba sexto en las eliminatorias sudamericanas, en la selección candidata a ser la gran sorpresa del Mundial 2014.

 

Seguidor de la escuela de su compatriota argentino Marcelo Bielsa, quien llevó a Chile a los octavos de final en Sudáfrica 2010, la “Roja” de Sampaoli se caracteriza por desplegar un juego ofensivo a partir de un 3-4-3 que busca constantemente presionar, abrir la cancha y explotar las bandas.

 

“Mis equipos no son tan directos como los de Bielsa y quiero disputarle más la posesión al rival”, dijo Sampaoli al diario español Marca.

 

Ganador de tres campeonatos locales consecutivos y la Copa Sudamericana 2011 con Universidad de Chile, Sampaoli fue nombrado en diciembre de 2012 en reemplazo de su compatriota Claudio Borghi, cuya gestión estuvo marcada por el escándalo de indisciplina conocido como el ‘Bautizazo’, que derivó en la suspensión de Arturo Vidal, Jorge Valdivia y otros titulares.

 

“Sampaoli le devolvió la unidad al camarín de la selección”, dijo Sergio Jadue, presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional, cuando el nuevo entrenador comenzaba a corregir una campaña clasificatoria que tenía a Chile fuera del Mundial.

 

Al tomar las riendas, Sampaoli acabó con los conflictos, recuperó el nivel de Vidal, Alexis Sánchez y Gary Medel –la columna de la selección–, y reintegró a Valdivia y David Pizarro, el volante de la Fiorentina automarginado desde 2005. Chile ganó cinco de sus últimos siete encuentros de las eliminatorias, y solo cedió puntos en un empate en Barranquilla, tras ir venciendo 3-0 a Colombia, y una inmerecida derrota en Lima ante Perú.

 

Tras sellar el pasaje a Brasil con el tercer puesto de Sudamérica, el oriundo de Casilda, en la provincia de Santa Fe, paseó su ambiciosa propuesta ofensiva por Europa, donde venció a Inglaterra, empató con España y cayó injustamente ante Alemania en sendos amistosos.

 

“Pocas veces un rival nos superó en todas las facetas del juego. Chile dominó el partido”, dijo el entrenador de Alemania, Joachim Loew.

 

Para enfrentar el Grupo B del Mundial, donde se medirá con el campeón vigente España, el subcampeón Holanda y Australia, Sampaoli promete mantener el protagonismo que lo ha convertido en quizá la selección más alabada del mundo en el último año.

 

“Si España tiene el balón, está cómoda. La idea es presionarle desde el principio y compartir la pelota”, dijo en la entrevista con Marca en la que confesó estar estudiando inglés e italiano ante la esperanza de que el Mundial le abra las puertas del viejo continente.

 

Sería el siguiente paso lógico para este ambicioso y apasionado técnico, que tras ver frustrada su carrera de futbolista comenzó a estudiar grabaciones de las charlas técnicas de Bielsa.

 

Ahora, tras sus humildes comienzos dirigiendo en Argentina, Perú y Ecuador, Sampaoli hizo que Chile deje de sentir nostalgia por el ‘Loco’ y deposite toda su confianza en otro timonel argentino para superar el histórico tercer puesto obtenido como local en el Mundial 1962.