Más de 3 mil indígenas miembros del CRAC recuperaron ayer las instalaciones de la Casa de Justicia de este municipio, y anunciaron la destitución de los coordinadores Eliseo Villar, Adelaida Hernández y Lorenzo Tiburcio, involucrados en un fraude por 800 mil pesos con fondos de esa organización.

 

A las 09:30 horas de ayer, militantes del Consejo Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC-PC), con respaldo de unos 500 policías comunitarios, protagonizaron una marcha por esta cabecera municipal tras la cual tomaron la Casa de Justicia, la cual había sido abandonada por los anteriores dirigentes, quienes están prófugos.

 

Valentín Hernández Chapa, consejero de la CRAC-PC, informó que los guardias comunitarios tienen instrucciones de detener a los ex coordinadores donde quiera que estén, pues además los hacen responsables de acuerdos turbios con el gobierno para abrir paso a las mineras extranjeras.

 

El pasado sábado 29 de marzo, durante una asamblea regional de las casas de justicia de San Luis Acatlán y Espino Blanco, que representan a 68 comunidades de la región, unos 30 comisarios, 28 comisariados ejidales y poco más de 30 consejeros de la organización indígena acordaron la destitución de esos mandos comunitarios por su conducta arbitraria y corrupta.

 

Los manifestantes marcharon ayer por las principales calles de esta cabecera municipal para dirigirse finalmente a la Casa de Justicia, donde tomaron posesión de las instalaciones, con respaldo de los guardias comunitarios.

 

Los militantes pensaban encontrar en su oficina a Eliseo Villar, pero este huyó llevando consigo en varios vehículos a unos 50 detenidos que mantiene recluidos sin justificación desde hace varios meses. Entre los bienes propiedad de la CRAC-PC, los defenestrados dirigentes se llevaron dos camionetas, una ambulancia y equipamiento de la Casa de Justicia.

 

“Jamás en la vida de la comunitaria habíamos tenido a un coordinador que sembrara tanto odio, tanto miedo, tanta violencia, pues detenía a hombres y mujeres sin motivo ni consideración alguna, lo que finalmente terminó deteniendo mucha gente inocente en la cárcel de la CRAC”, dijo Luis Vargas Ramírez, quien tiene un familiar recluido por la guardia comunitaria de Villar Castillo.

 

Tras la marcha, los militantes dieron posesión a Abad García García, Alberto Margarito Porfirio, Martín Encarnación de la Cruz y Jesús Carranza Rojas, como nuevos coordinadores de la Casa de Justicia de San Luis Acatlán, que es la instancia fundadora del sistema de justicia indígena.