El cofundador de la empresa de mensajería aclaró en su blog de oficial que no conocen nombres, direcciones, email, ni cualquier tipo de información privada del usuario. Esto, después de ser comprados por Facebook.

 

“Me gustaría dejar esto claro. Sobre todo, quiero asegurar que ustedes entiendan la forma profunda en la que valoro el principio de la privacidad de las comunicaciones”, explica, y agrega que es un tema muy personal.

 

“Nací en Ucrania y crecí en la Unión Soviética durante la década la década de los ochenta. Uno de mis recuerdos más fuertes de esa época era una frase que usaba frecuentemente mi madre cuando hablaba por teléfono: “Esta no es una conversación para el teléfono. Te lo diré en persona”. El hecho de que no podíamos hablar libremente por el temor a que nuestra comunicaciones podían estar monitorizadas por la KGB es en parte una de las razones por la que nos mudamos a los Estados Unidos cuando era un adolescente”, relata.