El presidente de Venezuela estimó que si su gobierno fuera desestabilizado por la oposición, vendría el peor periodo de inestabilidad política y económica para América Latina y el Caribe en dos siglos.

 

En un mensaje desde el Palacio de Miraflores, el mandatario venezolano alertó que el pueblo chavista todavía no ha peleado, por ello recomendó: “dejen quieto a quien quieto está”.

 

Maduro criticó la posición del secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, de querer hacer lobby (negociación) en la investidura de Michelle Bachelet como presidenta de Chile; “vino por lana y salió trasquilado”, bromeó el mandatario de Venezuela.

 

Aseguró que si hubieran matado a Hugo Chávez o lo hubiesen sacado del país en 2002, la revolución se hubiera tornado violenta. En ese sentido advirtió: “si nos toca pasar a la resistencia, pasaríamos a la resistencia de toda América Latina, y tenemos el poder para hacerlo”.

 

El objetivo es acabar con la revolución constitucional y bolivariana de Venezuela, dijo Maduro sobre las protestas contras su gobierno.