A consecuencia de la reforma político-electoral, aprobada por el Congreso de la Unión el año pasado y promulgada el 31 de enero, en 2015 se llevará a cabo una doble jornada electoral, que pondría en “alto riesgo” el sistema electoral nacional.

 

De acuerdo con la enmienda, el 7 de junio del próximo año se realizarán elecciones federales para elegir a los integrantes de la Cámara de Diputados, mientras que el primer domingo de julio se realizarían elecciones en 15 estados, entre ellas para elegir a nueve gobernadores.

 

Silvano Aureoles, presidente de la Junta de Coordinación Política de San Lázaro, confirmó lo anterior, al tiempo que advirtió el desfase de los procesos electorales en caso de no corregir la falla en las leyes secundarias, que deberán aprobarse a más tardar en mayo.

 

“En un escenario de que no se cumplan los tiempos tendríamos un desfase, abría elecciones el primer domingo de julio y el primer domingo de junio, situación que sería de alto riesgo para el sistema electoral nacional”, expresó.

 

El también coordinador del grupo parlamentario del PRD en San Lázaro recordó que en años pasados algunos congresos locales unificaron la fecha de sus elecciones para empatarlas con las de la federal, de tal suerte que sólo se tenía una fecha para realizar ambas jornadas.

 

Reconoció que persiste la confusión por el contenido de la reforma aprobada, debido a que no se ha definido la organización de los comicios del próximo año.

 

“El tema está muy enredado porque no se sabe aún quién organizaría las elecciones federales y quién las locales, el tiempo lo tenemos encima y considero que se tiene que resolver a tiempo, primero en el Senado de la República, después en la Cámara de Diputados y por último en los Congresos estatales”.

 

A su vez, la legisladora Amalia García Medina (PRD) sostuvo que “efectivamente hay diferentes estados que tienen calendarizado una fecha distinta a junio como se aprobó en diciembre pasado en la reforma político-electoral”.

 

“Será una decisión soberana de los Congresos locales hacer un esfuerzo para racionalizar y homologar las fechas de las elecciones estatales y las elecciones federales, para evitar este desgaste de la ciudadanía, esfuerzo y uso de los recursos”, citó la ex gobernadora de Zacatecas.

 

La solución

 

Ante el gasto que representaría la doble jornada electoral, así como el uso de recursos humanos y técnicos de un organismo todavía en confección (el Instituto Nacional Electoral), el legislador Marcos Rosendo Medina (PRD) manifestó que habrá que hacer un trabajo legislativo “de gran magnitud”.

 

“Para que las legislaturas locales puedan adecuar y homologar los tiempos con los de la federación, tendríamos en los próximos dos meses que emitir la reglamentación secundaria de la reforma político-electoral y que los congresos locales cambien la fecha de sus elecciones. Todo antes del 30 de abril”.

 

Ante las próximas elecciones intermedias, dijo, “sería un error tener una doble jornada electoral, gastaríamos más recursos federales para el mismo fin en esta época de austeridad, lo correcto es que adaptemos en una sola fecha ambas jornadas electorales, como desde hace años se ha realizado”.

 

Para detener los alcances de la reforma político-electoral, propuso, se tendría que generar un artículo transitorio a la reforma constitucional para que sus efectos se lleven a cabo a partir de 2018 y dejar que las elecciones del próximo año se lleven a cabo en un solo día.

 

Plazo oficial contradice a Aureoles

 

Respecto a los plazos para las elecciones siguientes, la reforma electoral mandata adelantar a junio los comicios federales y locales, con lo cual, el Consejo General del INE se reunirá en la primera semana de septiembre de este año para iniciar el proceso.
De acuerdo con el segundo artículo transitorio de la reforma, “la celebración de elecciones federales y locales el primer domingo de junio del año que corresponda, en los términos de esta Constitución, a partir de 2015, salvo aquellas que se verifiquen en 2018, las cuales se llevarán a cabo el primer domingo de julio”.

Contexto

 

La modificación del cambio de fecha surgió de las mesas de discusión llevadas a cabo al interior del Pacto por México, cuando la senadora Marcela Torres Peimbert (PAN) propuso anticipar un mes la fecha de la elección, para garantizar una mayor participación ciudadana, ya que consideró “en julio los ciudadanos gozan del periodo vacacional de verano”.

 

En un escenario de que no se cumplan los tiempos tendríamos un desfase, abría elecciones el primer domingo de julio y el primer domingo de junio, situación que sería de alto riesgo para el sistema electoral nacional

Silvano Aureoles

Presidente de la Jucopo