El pasado fin de semana fue el más negro de la historia de México porque con la discusión de la reforma energética en el Senado comenzó a consumarse “el robo del siglo, el atraco más grande que ha sufrido la Nación”, así lo afirmó Ricardo Monreal Ávila (MC).

 

Aseguró que los Partidos y organizaciones de izquierda están y seguirán peleando porque no van a traicionar “a millones de mexicanos que nos están pidiendo luchar, elevar la voz en la tribuna y en las actividades pacíficas”, por lo que, refirió, seguirán las protestas ciudadanas.

 

Indicó que el temor entre las autoridades por las acciones de resistencia “es tan grande”, que la sede del Senado de la República y la Cámara de Diputados está copada con medidas de seguridad excesivas, tanquetas y policías.

 

Resaltó que en San Lázaro se reforzó el cerco de seguridad, con policías del estado de México y otras entidades del país, así como con perros policías y un registro de los vecinos de las inmediaciones del recinto parlamentario.

 

Se han suspendido las garantías individuales de la población que vive en los alrededor de San Lázaro, sostuvo.

 

Denunció que los legisladores del PRI y del PAN quieren imponer una reforma energética “entreguista” y actúan “como auténticos traidores a la patria”, al abrir la participación de empresarios privados en las actividades del petróleo y la electricidad.

 

“Vamos a luchar con todo empeño y energía, con todas nuestras fuerzas, para que no se concrete este atraco, no importan los insultos y amenazas que recibamos”, aseveró el coordinador de MC.

 

Refirió que Movimiento Ciudadano seguirá insistiendo ante la Junta de Coordinación Política en que se suspenda la discusión de la reforma energética y se reflexione sobre el daño que se está causando al país.

 

“Vamos a seguir insistiendo que (con este tema) se está polarizando a la nación y se van a generar problemas severos de gobernabilidad”, agregó.