El Fondo Monetario Internacional (FMI) mantiene abierta una línea de crédito por 73 mil millones de dólares para México, ya que encontró una estabilidad económica y compromisos del gobierno para hacer cambios estructurales y mantener una política monetaria responsable.

“México continúa cumpliendo con los criterios de calificación necesarios para disponer, si así lo llegase a requerir y sin condición alguna”, informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y Banco de México (Banxico).

 

La línea de crédito contingente fue aprobada en noviembre de 2012 por un plazo de dos años, recordaron. Al término del primer año de vigencia de esta línea de crédito, el FMI realiza una revisión anual para evaluar la fortaleza de las políticas económicas y el estado que guarda la economía.

 

En ese sentido, el FMI destacó la “estabilidad macroeconómica” de México frente a la volatilidad financiera internacional, y subrayó los efectos positivos del “ambicioso” paquete de reformas estructurales que estimularán el crecimiento a medio plazo.

 

En su informe anual de revisión de la economía mexicana, conocido como artículo IV, el Fondo reiteró sus previsiones de crecimiento de 1.2% en 2013, aunque auguró un “fuerte rebote” del Producto Interno Bruto (PIB) en el segundo trimestre del año.

 

Este repunte se debe, de acuerdo a los técnicos del FMI, al “alza en el sector manufacturero en Estados Unidos y un nuevo impulso en el gasto público”.

 

Asimismo, el organismo internacional señaló que si finalmente la agenda de reformas es adoptada integralmente, podría elevar las perspectivas de crecimiento a medio plazo.

 

“Con la previsión de cambios estructurales en numerosas aéreas, como una mayor producción de hidrocarburos, mayor competencia en el sector de telecomunicaciones, expansión del sector financiero, y flexibilidad del mercado laboral” aumentaría la inversión, el empleo formal y la productividad, agregó el FMI.

 

Robert Rehnnhack, jefe de la misión del Fondo, calificó de “impresionante” el logro del gobierno mexicano de sacar adelante esta agenda de reformas “en su primer año”, especialmente la fiscal, financiera y energética, con el apoyo de los otros grandes partidos de oposición.

 

Por otro lado, y en un contexto de aguda volatilidad financiera internacional, la economía mexicana ha mostrado “más resistencia” que otros mercados emergentes tras el anuncio de la Reserva Federal de EU de iniciar sus discusiones para poner fin al agresivo programa de compra de bonos en mayo.