El canciller José Antonio Meade pidió al embajador de México en Egipto, Jorge Álvarez Fuentes, estar atento ante la declaratoria de emergencia en el país africano, por si fuese necesario emprender alguna medida en favor de los ciudadanos mexicanos que se encuentran en aquella nación.

 

La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) hasta ahora no ha considerado ninguna acción por la nueva crisis que enfrenta el país africano.

 

“La cancillería reitera las recomendaciones de precaución que se han dado a la comunidad mexicana residente, y especialmente a los ciudadanos mexicanos que se encuentren temporalmente en Egipto”, dijo la dependencia federal mediante un comunicado.

 

También condenó la reciente ola de choques entre policías y manifestantes pro Mursi: “la SRE deplora los actos de violencia registrados en Egipto que causaron numerosas muertes, así como centenares de heridos y detenidos”.

 

Finalmente expresó que México mantiene su “confianza en que mediante el diálogo, las autoridades y todas las fuerzas políticas egipcias serán capaces de encontrar soluciones a sus diferencias, de manera pacífica, apegada a derecho y respetuosa de los derechos humanos”.

 

Hoy el gobierno interino de Egipto declaró estado de emergencia en todo el país ante los disturbios desatados en El Cairo, tras la represión de la policía contra los seguidores del depuesto presidente Mohammed Mursi, acampados en varios puntos de la ciudad.

 

En un comunicado difundido por la televisión estatal, la Presidencia informó que la medida estará vigente en todo el país a partir de las 16:00 horas de El Cairo (14:00 GMT) de este miércoles y durante todo un mes a fin de regresar la calma al país.

 

El Estado de emergencia fue decretado después de los violentos enfrentamientos entre los partidarios y opositores al depuesto presidente y la intervención de las fuerzas del orden público, que dejaron 95 muertos y 526 heridos, según fuentes oficiales.

 

Sin embargo, la Hermandad Musulmana informó que al menos 600 personas han muerto durante la operación de las fuerzas contra los manifestantes concentrados desde hace más de un mes en las plazas Al Adauiya y Al Nahda de El Cairo, mientras que los heridos superan los dos mil.