WASHINGTON. Michael Hayden, ex director de la Agencia de Seguridad Nacional (ASN), advirtió que aumentaría el poder de vigilancia si Estados Unidos fuera objeto de un ataque mayor.

 

Esa declaración ocurre luego de que varios congresistas estadunidenses admitieran a The Washington Post que enfrentan difíciles condiciones para supervisar los programas de vigilancia del gobierno. Entre los obstáculos, están las complejas sesiones informativas sobre tales programas que han denunciado tanto republicanos como demócratas.

 

Jan Schakowsky, representante por Illinois, reconoció que el Congreso aprobó los programas de vigilancia extensiva sobre sospechosos pero rechazó que fueran con “pleno conocimiento” sobre su funcionamiento.

 

El general y ex director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Michael Hayden -en su presentación a la emisión De cara a la nación, de la CBS-, indicó cómo ha evolucionado en el tiempo el programa de recolección masiva de datos de la ASN.

 

Para Ryan Grim, del Huffington Post, esa declaración de Hayden sin proponérselo “abrió una ventaja justo a lo que no se conoce del programa”.

 

Cuando el anfitrión Bob Schieffer le preguntó al ex funcionario sobre la propuesta del presidente Obama para que un defensor de las libertades civiles vigile el cumplimiento de la Constitución en la corte FISA (que autoriza la vigilancia secreta en el exterior), Hayden dijo que esa medida sería “inapropiada” para el rápido curso de las investigaciones.

 

Al esbozar un escenario hipotético sobre las garantías apropiadas dijo: “después de un ataque, la ASN querría usar el vasto acopio de información que ha coleccionado de formas más agresivas”.

 

En general, Hayden sostuvo que se opone a que se involucre un defensor de las libertades civiles en ese proceso y advirtió que la lentitud de una reacción (en caso de ataque) traería reclamos.

 

Algunos críticos de esas operaciones de vigilancia sobre las comunicaciones privadas de los estadunidenses dentro de su país y de extranjeros sospechosos en el exterior han advertido que al construir esa capacidad de rastreo electrónico “el gobierno inevitablemente” estará tentado a emplear cualquier herramienta como esa a su disposición para evadir cualquier garantía constitucional que le obstaculice el camino.

 

El pasado viernes, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció medidas para reformar esos programas de inteligencia para dar mayor “transparencia” y reconoció que deben tener la confianza de los estadunidenses. Entre otras medidas, citó la creación de un comité de expertos independiente que revise las normas de supervisión de la Ley de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera (Fisa) y la Sección 215 de la Ley Patriota, que autoriza la recolección de datos telefónicos de los estadunidenses.

 

La edición dominical de The Washington Post cita a Jan Schakowsky, que además de representante demócrata por Illinois es miembro del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, quien declaró que en términos de supervisión, consideraba “insuficientes la mayor parte del tiempo” las medidas de los legisladores.

 

Asimismo, otros describieron que las medidas de seguridad que rodean las audiencias sobre información clasificada impiden abundar en su conocimiento.

 

El legislador republicano por Wisconsin, James Sensenbrenner Jr., afirmó que esas audiencias están diseñadas para evitar cualquier pregunta sobre el fondo de la cuestión y centrarse en aspectos legales. Por lo general, dice el diario, critican la forma como los funcionarios de las agencias de inteligencia evitan comentar elementos sustanciales de esos programas, a menos que los legisladores les formulen preguntas con gran precisión.

 

De acuerdo con el formato de las audiencias, existe una estricta normativa de seguridad y sólo los miembros del Comité de Inteligencia del Senado tienen acceso total. En contraste, los de la Cámara de Representantes deben confiar en ellos, muchos los cuales han trabajado previamente para estas agencias de inteligencia, precisa The Washington Post.

 

El diario fue, junto con el británico The Guardian, el primero en publicar las filtraciones sobre el alcance de estos programas de espionaje por parte del que fuera técnico de la CIA, Edward Snowden.

 

Reformas, “victoria” de Snowden: Assange

 

LONDRES. Como una “victoria” de Edward Snowden, consideró el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, el reciente plan anunciado por el presidente estadunidense, Barack Obama, sobre reformas de transparencia al programa de espionaje de Estados Unidos.

 

En un comunicado difundido en su sitio web, Assange destacó que el mundo debe estar agradecido con el ex empleado de la ASN porque, gracias a sus revelaciones, Obama impulsará cambios en la supervisión de sus programas de espionaje.

 

El mandatario anunció el viernes pasado su voluntad de introducir reformas para dar transparencia a los programas de espionaje masivo, con modificaciones a la Ley Patriota (Patriot Act) y a la Ley de Vigilancia de Inteligencia Exterior (FISA).