WASHINGTON. El ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn. criticó la falta de liderazgo en la Unión Europea (UE), a la que comparó con “un ejército de leones guiado por ovejas”, y su incapacidad para tomar decisiones de calado. “Si quieres que te diga que hay una crisis de liderazgo, te diré: la hay. Es como ese dicho árabe que dice que un ejército de leones liderado por ovejas siempre será derrotado por un ejército de ovejas liderado por leones. Eso es exactamente donde estamos”, dijo Strauss-Kahn en la primera entrevista a la cadena CNN que concede desde 2011.

 

Es la primera ocasión en que Dominique Gastón Andrés Strauss-Kahn, hijo de un fiscal y una periodista, conversaba con un medio estadunidense tras ser detenido en Nueva York en 2011 por una denuncia sobre presunto asalto sexual, caso que archivó la Justicia estadounidense, pero que lo obligó a dejar su cargo al frente del organismo internacional.

 

En su conversación, opinó que “el sistema bancario está muy enfermo. Mucho más de lo que la gente dice”. Más adelante, matizó sus fuertes afirmaciones y declaró que “algunos líderes en Europa están perfectamente preparados y saben lo que tienen que hacer, pero el sistema europeo está construido de tal manera que no se puedan tomar decisiones difíciles”. Sobre la actual crisis económica en Europa, el también ex ministro de Finanzas de Francia aseguró que los principales problemas se encuentran en el sistema bancario.

 

“El sistema bancario está muy enfermo. Mucho más de lo que la gente dice. Tiene que ser limpiado y arreglado antes de que el crecimiento vuelva. Si no solucionas el problema de los bancos en Europa, no volverá a haber crecimiento”, subrayó.

 

Por último, comentó los momentos posteriores a su detención en Nueva York y su paseo esposado ante las cámaras, una práctica habitual en EU conocida como perp walk.

 

“Lo más terrible, francamente. Especialmente porque tiene lugar en un momento en el que se supone que eres inocente. Y sucede que muestras a alguien como si fuese un criminal, y en el momento nadie sabe si es verdad o mentira”. Strauss-Kahn agregó que durante ese humillante paseo se sentía fundamentalmente “enfadado”. Concluyó la reflexión sobre los sucesos de 2011 con la admisión de que entonces “no sabía lo que ocurría, no entendía por qué estaba allí. Sólo sabía que algo ocurría y que no estaba bajo mi control”. EFE