Equipos perdidos, desfalcos al erario público por la contratación irregular de personal, incumplimiento de metas son sólo algunas de las observaciones emitidas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) al polémico programa de Cédulas de Identidad Personal iniciado durante la administración de Felipe Calderón.

 

A las observaciones por parte del órgano fiscalizador, correspondientes a los ejercicios 2008, 2009 y 2011, se suman la incertidumbre de los padres y escuelas sobre el uso de los datos de los menores entregados a la Secretaría de Gobernación.

 

El año pasado esa dependencia inició la recolección de datos personales de 6.6 millones de niños, pero sólo tres millones han sido entregadas. La Segob, por su parte, no ha respondido a este diario si es que el programa está vigente.

 

El registro para los menores de cuatro a 17 años arrancó en 2011, luego de cancelarse el proyecto para crear una cédula para mayores de edad, debido a la polémica entre el Instituto Federal Electoral y el Congreso de la Unión.

 

No obstante, el informe de fiscalización 2009 de la ASF reportó que la Segob gastó 195 millones de pesos para la compra de dos mil equipos de  cómputo, software y los dispositivos para tomar fotografías digitales, capturar la firma electrónica,  tomar las huellas dactilares, un escáner de documentos y otro de iris, una impresora de comprobantes de registro y lector de código de barras.

 

La ASF hizo una revisión  física del equipo  adquirido y encontró que el material se encontraba almacenado en bodegas de la dependencia,  en lugar de haberse distribuido en las entidades federativas para arrancar el Sistema Nacional de Identificación Personal.

 

El órgano fiscalizador también encontró en esa misma revisión que faltaban 31 computadoras. La empresa Smartmatic International Holding BV justificó el faltante al señalar que a los equipos se les cambió la tarjeta de memoria, pero la Segob nunca acreditó la actualización de las computadoras.

 

En el informe de ese año se establece un desfalcó por más de un millón de pesos al erario público, ya que la dependencia no acreditó con documentos la contratación de tres personas, ni los comprobantes de pago de las aportaciones patronales.

 

En su informe correspondiente a 2011, y publicado en febrero pasado, la Auditoría observó que Gobernación destinó 234 millones de pesos para emitir 91 millones de cedulas para niños y adultos entre 2010 y 2012. Sin embargo, sólo produjo 1.1 millones de cedulas, todas para menores de edad.

 

La ASF señaló que el incumplimiento del objetivo se debió a las diferencias entre la Segob y otras instancias como el Congreso de la Unión y el IFE, debido al rechazo por parte de estas últimas a la cédula para los adultos, y que llevó a Gobernación a iniciar el  registro de los menores de cuatro a 17 años.

 

A pesar de las fallas y retrasos en el programa, el compromiso 33 del Pacto por México establece el compromiso del presidente Enrique Peña Nieto y los representantes de los partidos de entregar la cédula de identidad en este sexenio.

 

DATO

3 MIL MDP ha ejercido el programa en seis años