Estados Unidos anunció medidas para agilizar las peticiones de residencia permanente que realizan ciudadanos a favor de sus familiares cercanos indocumentados que viven ilegalmente en el país.

 

El Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) informó que a partir de este lunes los estadunidenses pueden solicitar una exención o perdón provisional de presencia ilegal en el país para su cónyuge, hijos y padres que reúnan los requisitos establecidos.

 

Señaló que el proceso está dirigido a familiares cercanos de estadunidenses que han estado ilegalmente en el país para que obtengan la exención antes de viajar al exterior para una entrevista para una visa en la Embajada o Consulado de Estados Unidos.

 

El nuevo proceso busca reducir el tiempo en que los ciudadanos estadunidenses están separados de sus familiares inmediatos durante el proceso para la residencia permanente, indicó.

 

Bajo la ley en vigencia, los familiares inmediatos de ciudadanos estadunidenses que no reúnen los requisitos para ajustar su estatus en Estados Unidos tienen que salir del país para el proceso de la exención, la entrevista y la solicitud de la visa, indicó la entidad.

 

El USCIS sostuvo que incluso si aprueba la exención, el solicitante con caso pendiente debe salir del país para la entrevista ya programada en el exterior a la que tiene la obligación de presentarse.

 

Entre otros requisitos, los solicitantes de la exención deben demostrar que la separación familiar puede causar una dificultad o sufrimiento extremo a los ciudadanos estadunidenses que patrocinan sus casos.

 

El costo de la solicitud I-601A para la exención provisional de presencia ilegal es de 585 dólares a los que se agregan 85 dólares por datos biométricos, esta última tarifa se exonera a mayores de 79 años.

 

El USCIS recibió en 2011 aproximadamente unas 23 mil solicitudes de perdón y reunificación familiar, ya sea por razones de salud, económicas o humanitarias, de las cuales unas 17 mil fueron aprobadas.

 

En la actualidad, los indocumentados están sujetos a la llamada ley del castigo de 1996 que les impide regresar legalmente al país por espacio de tres a diez años dependiendo de su permanencia ilegal en Estados Unidos.

 

La ley actual incluye alivios para los ciudadanos estadunidenses con familiares cercanos indocumentados, pero la petición deben hacerla desde sus países de origen y el proceso se puede prolongar por mucho tiempo.