De acuerdo con el informe de Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública, que entrego la Auditoría Superior de la Federación (AFS), destaca que los gastos en el monumento Bicentenario Estela de Luz, tanto en plazo como en el monto originales fueron modificados mediante cuatro convenios, con un importe contratado fijo por 1,1464 millones de pesos (mdp) de los cuales ejercieron 1,139 mdp.

 

A la fecha del finiquito, se erogaron en total 1,304 mdp, monto que incluye el concurso arquitectónico del proyecto, los estudios técnicos previos, la ceremonia de colocación de la primera piedra y la construcción.

 

La ASF señala que de las revisiones practicadas, se determinó que se efectuaron pagos improcedentes por 248 mdp en el insumo principal del monumento de acero estructural, y 150 mdp por la incorrecta integración de precios extraordinarios y por diferencias en volúmenes y conceptos de la obra. Siendo el monto de las obras operaciones observadas 399 mdp.

 

Asimismo, la Auditoría encontró una “inadecuada toma de decisiones y falta de coordinación” entre la desaparecida Secretaría de la Función Pública (SFP), la Secretaría de Gobernación (Segob), la Secretaría de Educación Pública (SEP), el INEHRM, el Fideicomiso del Bicentenario, Banjercito y la empresa adherente a Petróleos Mexicanos (Pemex), I.I.I. Servicios S.A de C.V.

 

“Es de señalar que las acciones de fiscalización a cargo de la SFP y los órganos internos de control fueron limitadas y en sus actuaciones no observaron situaciones relevantes”, resalta en el informe.

 

Por lo anterior la ASF presentó dos denuncias de hechos el 11 de diciembre de 2012; la primera por el pago en exceso de 248 mdp por el concepto del acero inoxidable traído desde Italia, el cual debió pagarse al precio que señalaba el concurso; además de que hubo cambios en el peso volumétrico real del acero, y por ende, la diferencia entre el peso en el montaje y el transporte de la estructura metálica.

 

La segunda, por las acciones u omisiones de servidores públicos y terceros que implican “presuntas responsabilidades penales”, por generar un daño al Patrimonio de la Hacienda Pública Federal por un importe de 150 mdp.

 

De igual forma, recomendó que el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), en lo sucesivo, “se abstenga” de realizar funciones que no están incluidas dentro de su objeto de creación, en particular si carece de la capacidad técnica y humana para supervisar el desarrollo de obras públicas; además de determinar recuperaciones probables por 399,206.9 miles de pesos.

 

En cuanto al Parque Bicentenario en la ex Refinería 18 de Marzo, se detectó que mediante los diversos contratos entre la Secretaría del Medio Ambiente y la empresa Fonatur Constructora, S.A de C.V, hubo un incremento en el monto inicial de 495 mdp para quedar en 1.173 mdp, aumentado también el plazo de ejecución, de ahí que la obra se entrego hasta el 30 de noviembre del 2012, cuando se tenía predestinado para el 31 de diciembre del 2010, “quedando pendiente de formalizar el finiquito respectivo”.

 

A diciembre de 2012, el costo total del proyecto ascendió a 1,573 mdp, lo que evidencia el “inadecuado” proceso de planeación, presupuestación y ejecución, así como pagos improcedentes por 4.2 mdp.

 

A diferencia del dictamen del monumento Estela de Luz, el cual fue negativo; el del Parque Bicentenario salió “limpio”, por lo que la Semarnat, en términos generales cumplió con las disposiciones normativas; aún cuando quedan pendientes seis observaciones, entre las que sobresale la documentación justificativa y comprobatoria de 1,397 miles de pesos, en cuanto al suministro y colocación de película de control solar, ya que no concuerda con el costo real de mercado.