Los peritajes para definir las causas de la explosión que la víspera se generó en el sótano de la torre B del complejo central de Petróleos Mexicanos (Pemex) iniciaron pasada la media noche, informaron fuentes federales. (VIDEO)

 

Con ello se confirma que los peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) pudieron acceder a la zona en que se generó el siniestro. Estas investigaciones permitirán conocer las causas del evento.

 

Previamente se había adelantado que los peritajes no comenzarían hasta después de terminadas las tareas de rescate, sin embargo se sostuvo que durante la noche seguirá la búsqueda entre los escombros, para verificar que no hay más personas que requieran auxilio. En tanto, la dependencia presentó la lista de las personas heridas y los hospitales a los que fueron llevados

 

El gobierno federal informó que la explosión de ayer en la Torre de Petróleos Mexicanos (Pemex) causó al menos 25 muertos y 101 heridos, informó el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. Detalló que los fallecidos son 17 mujeres y 8 hombres.

 

Tras la explosión, las instalaciones estratégicas del país se pusieron en alerta, informaron fuentes de primer nivel del gobierno federal. Osorio Chong dijo que en el perímetro de Pemex se puso en práctica el Plan DNIII, de la Secretaría de la Defensa Nacional y Marina, que se aplica en desastres naturales.

 

En conferencia de prensa donde estuvo rodeado por los secretarios de la Defensa, Marina y el procurador general, Osorio Chong, adelantó que se siguen todas las líneas de investigación y dijo que se convocará a expertos internacionales para las investigaciones.

 

Junto con los funcionarios federales, desde un principio, estuvo el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera. Los cuerpos de seguridad capitalinos fueron los primeros en llegar a Pemex y comenzar las tareas de emergencia.

 

Mancera, confirmó esta noche que se recibieron “algunas” amenazas de bomba a las líneas de emergencia de la ciudad, entre ellas la de la Cámara de Diputados, pero sostuvo que ninguna resultó ser cierta.

 

También, a las 17:55 horas se recibió una amenaza de bomba en el edifico de la Secretaría de Salud (SSa), ubicado en Insurgentes y Reforma. Todo el personal fue desalojado.

 

A pregunta expresa de si se trató de un atentado, Osorio Chong no descartó ninguna hipótesis y se limitó a pedir que no se especulara, y esperar el peritaje que se realizará.

 

La prioridad, dijo, son las víctimas, rescatar a todas las personas, atender los heridos y familiares.

 

El detonador

 

Regresaban de comer la mayoría de los empleados del complejo de Pemex, otro grupo salía de su jornada normal y se formaban para checar su salida.

 

En todo el complejo trabajan alrededor de 10 mil personas. Eran entre las 15:40 y 15:45 horas, cuando explotó el mezzanine del edificio B-2, en segundos se desplomó, la detonación afectó los pisos hacia arriba y causó un agujero. Las áreas dañadas del edificio B-2 fueron la planta baja, sótano y mezzanine, explico Osorio Chong.

 

Los empleados que pudieron corrieron, otros se tiraron al piso o se escondieron.

 

Los primeros en llegar fueron paramédicos de la Cruz Roja, apenas seis minutos después de la detonación. Tras ellos, la policía del Distrito Federal, acompañados de elementos de Protección Civil.

 

Los agentes cercaron las áreas y llamaron al grupo táctico Fuerza de Tarea y Zorros, estos últimos encargados de desactivar bombas.

 

Sólo hubo un estruendo, que a lo largo de por lo menos cinco cuadras sintieron los vecinos de la colonia Verónica Anzures como un temblor. No hubo fuego, sólo humo.

 

El grupo de granaderos se encargó de cerrar la zona perimetral, a dos cuadras de distancia de Pemex.

 

Protección civil y cuerpos de rescate se encargaron de sacar a los empleados que permanecían en las instalaciones de la paraestatal, lo mismo que los heridos.

 

La evacuación se hizo sobre la calle Bahía del Espíritu Santo. Empleados de Pemex que estaban dentro del complejo también comenzaron las labores de ayuda a sus propios compañeros. Tareas que se extendieron durante las siguientes horas, porque bajo los escombros quedaron atrapados algunos trabajadores.

 

Por la frecuencia de radio de la policía se escuchó, casi 20 minutos después de la detonación, que abrieran paso a una ambulancia que custodiaba el grupo Zorros, especializado en desactivar bombas.

 

La salida de la ambulancia fue con clave 5, que se traduce en salida rápida. La ambulancia no llevaba heridos, pero no se informó que transportaba en su interior.

 

Elementos del Ejército llegaron a las instalaciones y tomaron el control de la seguridad del primer cinturón, a las afueras del edificio.

 

Las luces del resto de los edificios se apagaron, personal especializado cerró todas las llaves y llegaron pipas de agua en caso de incendio, tras la remoción de escombros.

 

Llegaron al lugar perros entrenados en la localización de explosivos y también caninos entrenados en la ubicación de personas bajo escombros. Donde se registró la explosión se ubica, en el sótano, el área en la que se estacionan los autos de los directivos, es un área que comunica a todos los edificios; en ese sótano, la planta potabilizadora de agua y la subestación eléctrica que surte al edifico B-2.