El financiamiento es uno de los principales retos que enfrenta México para sus programas que promueven un desarrollo sustentable, una vez que Europa, el principal comprador de bonos de carbono al país dejará de hacerlo conforme a los plazos establecidos en el Protocolo de Kioto.

 

La senadora Ninfa Salinas Sada, presidenta de la comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales en el Senado, dijo a 24 HORAS que existen mecanismos internacionales que permiten el acceso a financiamiento para fomentar proyectos exitosos, por lo que se buscará contactar con países que tienen este tipo de incentivos para que México los pueda recibir.

 

“Es una alternativa para adquirir fondos e impulsar proyectos novedosos que nos ayuden con el control de la emisión de gases de efecto invernadero”, puntualizó ayer luego de participar en la ceremonia de instalación de la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático, encabezada por el presidente Enrique Peña Nieto y el titular de la Semarnat, Juan José Guerra Abud.

 

La Ley General de Cambio Climático vigente desde hace unos tres meses establece la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero como una prioridad, sin embargo, esta acción depende de nuevos acuerdos internacionales en la materia y mayores recursos.

 

El país había sido uno de los países con mayor participación en el programa de bonos de carbono, bajando sus emisiones de gases de efecto invernadero y vendiendo los procesos a países industrializados para que consignaran sus metas anuales de reducción de contaminantes.

 

Durante la Conferencia de las Partes de la Convención para el Cambio Climático (COP 18) en Doha, en diciembre pasado, el gobierno mexicano votó por un segundo periodo de compromisos bajo el Protocolo de Kioto, con el fin de dar certidumbre a las acciones de mitigación de los siguientes años y buscar convenios internacionales para incentivar las innovaciones verdes.

 

En su intervención, el premio Nobel de Química, Mario Molina, consideró como un gran error que México llegara a tener planes de política energética y de desarrollo económico sin considerar un acuerdo internacional que estipule un precio a las emisiones, como sucedía con los bonos de carbono.

 

ESTRATEGIA AMBIENTAL

 

El presidente Enrique Peña Nieto encabezó la ceremonia de instalación de la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático, cuyo fin será atender los efectos de este fenómeno y hacer que México logre un desarrollo económico sostenido y sustentable, a través de un trabajo transversal que incluye el esfuerzo de 13 secretarías, encabezadas por la de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

 

Para ello, el Ejecutivo anunció un presupuesto de 34 mil 500 millones de pesos, etiquetados para atender las acciones en materia de cambio climático.

 

La senadora Ninfa Salinas Sada, expresó que luego de esta acción es necesario fortalecer a las instituciones de gobierno, asignar correctamente el presupuesto y capacitar a los funcionarios.

 

De igual modo, Peña Nieto convocó a la creación del Sistema Nacional de Cambio Climático, para que autoridades, legisladores, organizaciones civiles, académicos y expertos en la materia trabajen conjuntamente las acciones para que el país alcance una economía baja en carbón, rectifique el manejo del agua y mejore la gestión de residuos.

 

Juan José Guerra Abud, titular de la Semarnat, dio a conocer que si bien el país aporta apenas 1.3% de las emisiones de CO2 mundiales, por su ubicación geográfica, biodiversidad y características del territorio, México podría ser de los más afectados si la temperatura global sigue en aumento.