El padre Alejandro Solalinde, responsable de la Casa del Migrante de Ciudad Ixtepec “Hermanos en el Camino”, denunció ante autoridades fiscales de Chiapas nuevas agresiones en contra de migrantes centroamericanos cometidos durante los primeros días de este 2013 por parte de policías y servidores públicos.

 

El galardonado con el Premio Nacional de los Derechos Humanos 2012, detalló que los ataques contra centroamericanos se dieron en Coita, Arraiga y la zona de Tapachula.

 

Solalinde delineó además dos iniciativas a seguir en defensa de las mujeres y de los migrantes, la primera es activar un movimiento social que frene los feminicidios en el país, ya que “las mujeres se deben defender ellas mismas de los abusos. Yo las apoyaré”, asentó el padre defensor de los derechos humanos.

 

Una segunda propuesta al Ejecutivo federal, encabezado por Enrique Peña Nieto, establecer que se debe aceptar que hubo destrucción de migrantes en el pasado, para trazar una ruta forense a lo largo del territorio nacional para saber dónde, cuántos y quiénes son los desaparecidos.

 

“Con esta propuesta Enrique Peña Nieto tendrá que tener el valor de aceptar el pasado e invertir dinero para saber la verdad. No pido que se haga justicia, sino que se enfrente la verdad de las fosas de migrantes en estados como Veracruz. El presidente para demostrar su imparcialidad no pido que meta a la cárcel a Fidel Herrera, sino que investigue dónde están los muertos”, acusó Solalinde.

 

Admiro al EZLN y al Subcomandante Marcos, dice

 

Sobre la reciente reaparición del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), el padre les aplaudió su lucha por los indígenas de Chiapas y recalcó que les tiene admiración, al grado de que calificó al Subcomandante Marcos como un “profeta”.

 

“Los zapatistas son una alternativa de buen gobierno. Son el ejemplo de que sí se puede gobernar desde abajo. Los hermanos zapatistas son los mejores, porque ellos respetan la tierra y no permiten su enajenación”, dijo.

 

Y añadió: “Son personas con convicción, disciplina y conciencia. El subcomandante Marcos es un hombre claro y verdadero. Lo admiro mucho, para mí es un profeta, aunque muchos no les agrade oírlo. No lo conozco personalmente, pero sí conozco el trabajo que hace. Mi solidaridad y respeto hacia ellos”. (Con información de Fórmula)