Trabajadores y oficiales de seguridad afinan los últimos detalles de seguridad al interior y exterior del Congreso de la Unión en San Lázaro, en la Ciudad de México, para la toma de protesta de Enrique Peña Nieto la mañana de este sábado.

 

Elementos de la Policía capitalina, de la Policía Federal y del Estado Mayor Presidencial arribaron esta mañana para participar en el operativo que podría extenderse hasta la noche del sábado en otras partes de la ciudad, como las inmediaciones del Palacio Nacional y del Castillo de Chapultepec, donde acudirá el nuevo presidente después de la ceremonia de asunción.

 

Al interior del pleno de San Lázaro, se ha reportado la colocación de muebles para más invitados a la ceremonia de protesta, así como macetones a los costados para evitar cualquier acto de inconformidad.

 

Se prevé que legisladores no opositores al Partido Revolucionario Institucional, desplieguen una estrategia de defensa justo cuando arribe Peña Nieto por el pasillo central.

 

Trabajadores del recinto legislativo afinan los últimos detalles respecto a limpieza y aspecto de las instalaciones, así como la sala de prensa que recibirá a casi 1,800 periodistas nacionales e internacionales.