Empresarios propietarios de gasolineras, empresas de transporte, gaseras y otros negocios de la zona noreste del país se encuentran bajo la lupa de las autoridades federales, por haber comercializado combustibles sustraídos ilegalmente de un ducto de PEMEX, con la protección de Los Zetas y El Cártel del Golfo.

 

Autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR) informaron a 24 HORAS que los compradores adquirieron gasolina, diesel y otro tipo de hidrocarburos a pesar de sospechar que su origen era ilícito, pues su costo era hasta 50 por ciento menor que el combustible que vende la paraestatal en el mercado legal.

 

Las identidades de estos compradores se mantienen bajo reserva de las autoridades federales, pues se trata de la segunda fase de una investigación que fue revelada públicamente ayer y que en su primera etapa permitió desarticular a la principal célula de comercialización de hidrocarburos robados de ductos de Pemex que operaba en Nuevo León y Tamaulipas.

 

Se trata de un negocio lucrativo para los delincuentes, ya que tan sólo entre el 2010 y 2011 causó pérdidas por más de 7 mil 500 millones de pesos a la paraestatal a nivel nacional, según las estimaciones de Pemex Refinación.

 

El encargado de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), Rodrigo Archundia Barrientos, detalló los resultados de esta averiguación, iniciada hace varios meses y que, de entrada, dejó seis personas detenidas y arraigadas.

 

El saldo de lo decomisado al grupo delictivo da una idea de la dimensión de su operación: 910 mil 131 litros de distintos combustibles, valuados en más de 8 millones 600 mil pesos, ocho inmuebles, 91 vehículos -entre camiones, tractocamiones, autotanques, camionetas y autos de lujo-, además de la toma clandestina del ducto de Pemex.

 

Archundia subrayó que esta célula delictiva operaba gracias a la protección logística que les daba el crimen organizado y en particular Los Zetas y El Cártel del Golfo, quienes cobraban una comisión de las ganancias que arrojaba la venta clandestina de los combustibles.

 

La investigación

 

En junio pasado, la PGR recibió una denuncia anónima en la que se advertía que un grupo de personas ligadas al crimen organizado se dedicaba al robo de combustible en grandes cantidades, el cual era transportado en pipas que también eran robadas.

 

El trabajo de investigación ministerial, apoyado con el intercambio de información con Petróleos Mexicanos, permitió ubicar diez inmuebles en Nuevo León, entre los que se encontraban el predio con la toma clandestina al ducto de PEMEX, dos empresas que recibían y almacenaban el combustible, dos gasolinerías que lo distribuían y domicilios de los involucrados.

 

Entre el combustible asegurado se encuentran 640 mil litros de una mezcla de hidrocarburos robados denominada “combustóleo”; 113 mil litros de diesel; 92 mil litros de gasolina Magna y 26 mil litros de gasolina Premium, aproximadamente.

 

El encargado de la SEIDO indicó que entre los seis detenidos y arraigados se encuentra Fabián Rodríguez Moreno, considerado el líder de la célula delictiva y cuya residencia se encontraba en el municipio de San Pedro Garza García, así como Irineo Pompa González, principal operador y prestanombres de la organización.

 

 Más de 600 detenidos

 

Cifras de Petróleos Mexicanos (PEMEX) indican que del 2006 a la fecha, cerca de 600 personas han sido detenidas en todo el país por robo de hidrocarburos, aunque la detención realizada ayer fue considerado por la paraestatal como el golpe más contundente a este tipo de actividad ilícita de los últimos años.

 

El Director Jurídico de la paraestatal, Marco Antonio de la Peña Sánchez, indicó que tan solo en los últimos tres años se han implementado 36 operativos coordinados con autoridades federales como la PGR, la Secretaría de la Defensa Nacional, La Armada de México y el CISEN.

CIFRAS

 

600 detenidos

60 millones de litros robados

7,500 MDP de pérdidas en dos años