BRUSELAS. La Comisión Europea (CE) aceptó hoy formalmente los 930 mil euros del Nobel de la Paz 2012 con el que ha sido premiada la UE y anunció que destinará esta cuantía a proyectos que apoyen a niños víctimas de la guerra y conflictos.

 

“El premio Nobel de la Paz es sinónimo de reconciliación en todo el mundo. El dinero del premio debe beneficiar a la primera esperanza para el futuro, que también es la primera víctima de los conflictos presentes y pasados: los niños”, afirmó el presidente de la CE, Jose Manuel Durao Barroso, mediante un comunicado.

 

Durante las próximas semanas, el Ejecutivo comunitario perfilará los detalles del proyecto, tales como el proceso de selección de los beneficiarios, así como los aspectos legales y presupuestarios.

 

La decisión de entregar los 8 millones de coronas suecas del premio a las víctimas más jóvenes de los conflictos armados llega después de un acuerdo entre el presidente de la Comisión, el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el del Parlamento Europeo, Martin Schulz.

 

Además de la recompensa monetaria, la Unión Europea recibirá también una medalla y un diploma, que conservarán las instituciones comunitarias en nombre de toda la Unión.

 

Asimismo, la CE ha puesto hoy en marcha un concurso para que cuatro jóvenes europeos acudan al acto de entrega del galardón el próximo 10 de diciembre como parte de la delegación oficial de la UE, que encabezarán los presidentes de la Comisión, del Consejo y del Parlamento.

 

Concretamente, se pedirá a los jóvenes europeos que contesten a la pregunta “La paz, Europa, Futuro: ¿Qué significa la paz en Europa para ti?”.

 

Los niños de entre 8 y 12 años deberán contestarla mediante un dibujo, mientras que los jóvenes de entre 13 y 24 años lo harán a través de un texto de 120 caracteres en alguna de las 23 lenguas oficiales de la UE.

 

“Nuestra tarea es siempre inspirar a la próxima generación de europeos. Por eso queremos que la juventud europea, que va a heredar un continente de paz y que será responsable del futuro de Europa, esté presente con nosotros en Oslo”, afirmaron los tres presidentes.