La elección presidencial en Estados Unidos se convirtió en el evento más mencionado del año en la popular red social Facebook, de acuerdo con información de la misma compañía, que en su blog corporativo reportó un total de 71.7 millones de menciones alusivas a la elección presidencial solamente en Estados Unidos. En una escala del 0 a 10 del “Talk Meter”, medición que Facebook utiliza para evaluar su comportamiento, el tópico alcanzó una calificación de 9.27, superando al Super Bowl, que alcanzó un 8.62 y la Serie Mundial de Beisbol, cuyo 6.1 de calificación lo sitúa como el tercer evento del que más hablaron los usuarios de la red social. El segmento de edad que se presentó más activo, de acuerdo con información del mismo blog, fue el de los 25 a 34 años.

 

Pero más allá de los comentarios del público en general, los candidatos en las redes sociales una vez más dieron de qué hablar.

 

No es noticia que Barack Obama cuenta con un equipo muy eficiente en el manejo de la comunicación en redes sociales, que ya hace cuatro años fue en buena medida responsable del éxito de su campaña, particularmente en segmentos jóvenes. Entonces la población de las redes sociales, si bien era lo suficientemente importante para incidir en la elección, no contaba en Estados Unidos con más de 150 millones de usuarios de Facebook.

 

Este año, por ejemplo, el equipo del presidente estadunidense envió mensajes directos a través de Twitter invitando a la acción, literalmente creando brigadas digitales para que la gente a su favor votara por él: “Be the difference in this election today–help people find their polling place & know where to volunteer”. Quienes hacen uso de las redes sociales sabrán que la parte emocional/afectiva (todo gira alrededor de tu círculo social, amigos, familiares, contactos), es fundamental para lograr la conexión debida con la audiencia y Obama lo puso en práctica. Basta dar un vistazo a sus últimos tuits el día de la elección: “Four more years” con la fotografía de él y Michelle Obama fundiéndose en un emotivo abrazo, “We’re all in this together. That’s how we campaigned, and that’s who we are. Thank you. –bo”, y “This happened because of you. Thank you”. Por otro lado podemos intuir el nivel de influencia en redes sociales si vemos las cifras de Twitter, por ejemplo, donde Obama cuenta con casi 23 millones de seguidores (sí, es presidente y eso le da cuatro años de ventaja, pero ventaja al fin y al cabo), y los apenas más de 1.7 millones con que cuenta Mitt Romney.

 

Es de llamar la atención también que en estados como Pennsylvania, donde Mitt Romney puso muchísimo dinero en la televisión a comparación de la inversión a favor de Obama en el mismo medio, la victoria fuera para el demócrata. Este hecho no es concluyente de que las redes sociales fueron la variable que definió elección pero sí lo es que la inversión en el medio tradicionalmente conocido como más influyente, no garantiza la victoria. La televisión y las redes sociales son sólo una táctica dentro de una estrategia de comunicación más grande. Y la estrategia de comunicación es sólo una parte que ayuda a entender una visión de país.

 

Visión, estrategia y táctica, al menos en lo que concierne a redes sociales, parecen haber estado muy conectadas en el caso de Barack Obama.

 

@jorgetaboada