Lo que inició como un conflicto meramente estudiantil por la impugnación de fórmulas al Consejo Universitario de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) y que derivó en un paro de actividades de más de 40 días, hoy parece evidenciar intereses académicos, laborales e incluso políticos.

 

Según declaraciones de integrantes de la Red Estudiantil en Defensa de la Educación (RED), en el conflicto no sólo está involucrado el Consejo Estudiantil de Lucha (CEL), también un numeroso grupo de académicos, la mayoría de procedencia extranjera, e integrantes del Sindicato Único de Trabajadores de la UACM.

 

Tal es caso de Claudio Albertani Ganassini, de origen italiano, quien se desempeña como subsecretario de Asuntos Laborales del sector académico, imparte la materia de historia y es uno de los más fuertes críticos a la gestión de la rectora Esther Orozco.

 

Albertani, junto con la profesora Fabiana Medina y Alberto Benítez, ex profesor de esta casa de estudios, se encontraban al interior del plantel Cuautepec la semana pasada, cuando estudiantes en contra del paro recuperaron las instalaciones.

 

A ellos se suman, Javier Marmolejo, Carlos González y Mónica Sarnari, a quienes se les ha visto al interior de los distintos planteles apoyando el movimiento parista ya sea con víveres, dinero o incluso automóviles.

 

“Tenemos información de que varios de los profesores y alumnos que apoyan este movimiento están ligados a Morena, incluso sabemos que son apoyados por este grupo político con insumos y comida para los paristas”, denunció José Alí Flores, estudiante del doctorado en Ciencias Genómicas del plantel Del Valle.

 

En entrevista, Albertani reconoció que se trata de un movimiento que surgió hace dos años como un conflicto laboral que después se tornó académico y ahora con la integración de los estudiantes incluye a toda la comunidad universitaria.

 

“Esta última fechoría de rectoría es la que ha conducido a esta situación, se nos quiere involucrar a fuerza en la toma de planteles, pero tampoco podemos ser neutrales ante el “golpe de estado” de desconocer el triunfo de los consejeros. Claro que sostenemos a los estudiantes, yo los sostengo porque creo que es una acción legítima si queremos defender a la Universidad y lograr su solución por la vía del diálogo”, admitió Albertani.

 

Acusó a Orozco de ejercer políticas dictatoriales en contra del personal universitario, como la “desaparición” de las cuotas sindicales, de desconocer los resultados del proceso electoral, con tal de preservar el poder y del despido de profesores como John Erik Hazard, de origen estadounidense y quien se desempeñaba como instructor de inglés.

 

A Hazard se le acusa de agredir al profesor Marco Antonio Trejo Velázquez y a dos integrantes del CU; Julio César Chávez, quien buscó por el PRD una candidatura a diputación federal en Ecatepec y a Gloria Luz Alejandre.

 

Este ex profesor, es también uno de los actores activos del movimiento en contra de Orozco, pues tras recibir una notificación por parte de la Universidad para comparecer por las agresiones que se le imputan, Hazard convocó a la comunidad universitaria a una protesta el día de su comparecencia el 7 de febrero del año en curso.

 

Para ese día, el académico sugirió llevar pancartas con cuatro peticiones: la reinstalación inmediata de todos los despedidos, cancelación de todos los procesos abiertos contra trabajadores y cese al hostigamiento laboral, que no se realizara ninguna reforma académica hasta la instalación del Consejo Universitario, relevo del Segundo Consejo Universitario en tiempo y forma y la renuncia o destitución de Esther Orozco.

 

“Hazard asegura que los cargos que se le adjudican son mentiras, pero lo único cierto es que cada quien está viendo por sus intereses, él quiere que se le devuelva el trabajo, pero se trata de una persona sumamente agresiva”, acusó Alma Villalobos, estudiante del plantel Del Valle e integrante de RED.

 

Insistió en que al interior del movimiento hay gente que ya no estudia y que desde el Segundo Consejo Universitario se han dedicado a sabotear las sesiones y a agredir a los estudiantes, luego de que en esta Universidad se carece de normas de convivencia para alumnos y profesores.

 

Ejemplo de ello, dijo, es Roberto López, quien anteriormente se encontraba matriculado en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y quien fue suspendido de esa casa de estudios por disturbios durante el conflicto universitario.

 

López es acusado de liderar un grupo de choque que intimida y golpea a estudiantes del plantel San Lorenzo Tezonco que están a favor de la apertura de los planteles, incluso se le vincula con la agresión directa a una estudiante que se manifestó de manera pacífica en Casa Libertad.

 

“Muchos de los paristas son a quienes se les impugnó su ingreso al CU, como Víctor Campos quien estuvo repartiendo propaganda cuando eso estaba prohibido, o Ramón Islas, vinculado a Morena y quien no cuenta con el porcentaje de créditos para formar parte del Consejo, o Luis Villanueva de Casa Libertad, quien el día de la elección renunció a su candidatura y luego tras saberse ganador exigió su nombramiento, que al no tenerlo, optó por tomar el plantel”, agregó José Alí Flores.

 

Aunque ya parece vislumbrarse en los próximos días una salida al conflicto, la comunidad estudiantil se encuentra totalmente dividida, por un lado los que buscan concluir sus estudios, por el otro los que quieren reinsertarse al Consejo Universitario y otro sector, el académico, que pretende la destitución de la rectora Esther Orozco.

 

Hoy se reúne la comisión mixta

 

Este lunes inician de manera formal los trabajos de la comisión mixta que acordaron conformar las partes en conflicto en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), y que mantiene cerrados los cinco planteles de esta casa de estudios desde hace más de un mes.

 

La comisión, cuya conformación se acordó apenas la madrugada del 6 de octubre, podría hacer un pronunciamiento sobre las impugnaciones del proceso de renovación del tercer Consejo Universitario y emitirá una opinión sobre su instalación.

 

Dicha comisión, que se reunirá en la sede de la Secretaría de Educación del Distrito Federal, realizará un pronunciamiento en un máximo de 72 horas posteriores a su integración, para que, el jueves 11 de octubre, sesione el tercer Consejo Universitario y sean devueltas las instalaciones de la UACM el viernes 12.

 

La comisión mixta está conformada por tres integrantes de la comunidad universitaria representantes de cada parte: Samuel Vázquez, Miguel Ángel del Moral y Manuel Gutiérrez Natividad; además de Mónica Oliva, Karla Montalvo y Carlos Villanueva.

 

La comisión estará acompañada además de Carlos Heredia, Enrique Dussel, Leoncio Lara, Enrique Fernández Fassnacht y Miguel Concha.

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