El gobierno federal, la Secretaría de Agricultura y la de Economía afirman que la apertura de la frontera mexicana a las papas frescas de Estados Unidos tiene un impacto moderado y no será un desastre agrícola nacional, como aseguran los productores y distribuidores mexicanos del alimento.

 

Como informó 24 HORAS, la Central de Abasto de la Ciudad de México recibió 944 cargamentos con papas contaminadas de Estados Unidos entre 2003 y 2012, por eso los productores y comerciantes exigen que no se deje entrar ese producto al país.

 

“Embarques que inclusive fueron certificados por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos de América (USDA), lo cual demuestra la inconfiabilidad y seriedad de las autoridades fitosanitarias y de los mecanismos de certificación de Estados Unidos”, denuncia la Central de Abasto de la Ciudad de México en una carta fechada el pasado 20 de septiembre y dirigida a la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer).

 

El martes de la semana pasada, ante las quejas de los más de ocho mil 700 productores, Bruno Ferrari, secretario de Economía, dijo que las denuncias obedecen a políticas anticompetencia que perjudican al país.

 

“El sector busca el proteccionismo. Las papas americanas pagan un arancel de 245%, pero nuestros consumidores en este momento no tienen precios accesibles”, afirmó el funcionario.

 

En entrevista con 24 HORAS, Bosco de la Vega Valladolid, coordinador de negociaciones de la Confederación Nacional de Productores de Papa de la República Mexicana (Conpapa), lamentó las declaraciones del Secretario.

 

“El señor Ferrari hizo una negociación sin tomar en cuenta el riesgo sanitario, lamentamos que nos acuse de proteccionistas y no sepa que la papa no tiene arancel”.

 

Rubén Ríos Bastida, presidente de la Central de Abasto de la Ciudad de México, dijo por su parte que los estadunidenses sabían que sus papas venían infectadas y desistieron de colocarlas en el país cuando les regresaron los cargamentos.

 

Ferrari también dijo a este diario: “Será muy bueno preguntar a los consumidores de Estados Unidos si las papas están contaminadas y si se están muriendo los consumidores saliendo de las hamburguesas”.

 

“Ferrari dice que la gente no se enferma, y es cierto, el problema será para los cultivos, por eso los productores de papa se pronuncian. Pero eso no le toca saberlo a un Secretario de Economía, por eso le estamos informando”, dijo Bosco de la Vega, de la Conpapa.

 

“Los problemas fitosanitarios que tiene la papa afectan a los suelos ya la producción. Las semillas trasladan virus, hongos y nemátodos que llegan a los suelos, pueden contaminar las tierras de cultivo durante 50 años”, explicó De la Vega.

 

Mediante dos comunicados de prensa, la Secretaría de Economía, la Sagarpa y el gobierno federal respondieron que los niveles de protección sanitaria son los adecuados.

 

“El gobierno federal, de manera congruente con lo dispuesto por el Acuerdo sobre la Aplicación de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias de la OMC, defenderá el derecho de México para fijar un nivel adecuado de protección que permita proteger la sanidad vegetal en nuestro país de la introducción de plagas y enfermedades, siempre que ello responda al riesgo demostrable y fundado en evidencias técnicas y científicas disponibles. Al mismo tiempo, el gobierno federal, a través de la Secretaría de Economía, continuará vigilando que el comercio con nuestros socios comerciales no se establezcan barreras innecesarias e injustificadas”, asegura.