Andrés Manuel López Obrador convocó a sus seguidores a la desobediencia civil y a realizar una marcha el domingo 9 de agosto tras desconocer el fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en torno a la elección presidencial.

 

No puedo aceptar el fallo del Tribunal Electoral. Las elecciones no fueron limpias, libres, ni auténticas”, señaló.

 

“No voy a reconocer al poder ilegítimo surgido de la compra del voto y de otras violaciones graves a la Constitución y a las leyes”, aseguró el tabasqueño, ya que de hacerlo, aseguró, “implicaría traicionar a millones de mexicanos que luchan contra la simulación, la farsa, y que están a favor de un cambio verdadero”.

 

López Obrador agregó que aunque se deben respetar las instituciones, el problema de México es que éstas se encuentran “secuestradas por la delincuencia de cuellos blanco“. “Y un Estado que no procura la justicia ni la democracia, no es más que un instrumento de poder al servicio de intereses creados”.

 

“Ojalá se entienda que así como ellos defienden por todos los medios al régimen de corrupción nosotros estamos por abolirlo y no haremos ninguna tregua ni concederemos la más mínima ventaja”, agregó.

 

Por ello convocó a sus simpatizantes a reunirse en el Zócalo del Distrito Federal el próximo domingo 9 de septiembre para “dirimir lo que sigue”.