LONDRES.  Los planes británicos de seguridad para los Juegos Olímpicos estuvieron de nuevo bajo escrutinio el domingo, mientras que un periódico reportó que varias personas en la lista de terroristas buscados cruzaron los controles de seguridad del aeropuerto sin ser señalados y funcionarios intentan acallar el alboroto por el fiasco con el contratista de seguridad que no pudo cumplir con el número de guardias prometido.

 

El reporte del periódico The Observer es el más reciente en una serie de preocupaciones que han salido a la luz de último minuto mientras Londres se prepara para dar inicio a los Juegos Olímpicos el 27 de julio.

 

El diario dijo que, desde principios de mes, el personal de inmigración en el aeropuerto Heathrow de Londres no ha detectado a varias personas en la lista de seguridad cuyo arribo al país requería dar aviso a la policía antiterrorismo o al servicio de inteligencia británico.

 

El periódico citó a sindicatos, sugiriendo que el personal contratado para ayudar a liberar la presión en Heathrow, que ha enfrentado problemas recurrentes ante un amplia afluencia de pasajeros, no habían sido debidamente capacitados.

 

El aeropuerto más transitado de Europa ha pasado problemas recientemente para disipar las grandes líneas de personas que se acumulan en los controles de inmigración en las horas pico, lo que lleva a temores por el caos que provocarán los turistas que asistirán a ver los Juegos Olímpicos.

 

El reporte no aclaró si las personas en la lista de buscados seguían en el país, ya sea que fueron interceptados posteriormente, o cuál era el motivo exacto que llamó la atención de las autoridades antiterrorismo. La oficina británica no respondió el domingo al llamado para comentarios sobre el reporte de The Observer.

 

Las autoridades británicas están ya bajo presión luego de que la empresa G4S anunciara que no podría cumplir con su contrato.

 

El secretario de Cultura Jeremy Hunt dijo a la BBC el domingo que no era el momento de buscar culpables por la incapacidad de la compañía G4S para proveer los 10 mil 400 guardias a los que se había comprometido para la justa deportiva que inicia el 27 de julio y termina el 12 de agosto.

 

Hunt dijo que el gobierno actuó rápidamente y activó un plan de contingencia para emplazar 3 mil 500 soldados extra tan pronto como se supo que G4S no podría cumplir con su contrato. AP