Cientos de personas disfrutaron en las calles de Nueva York el fenómeno llamado  “Manhattanhenge”, el cual consiste en el alineamiento del sol al atardecer en las inmediaciones de la Gran Manzana.

 

El “Manhattanhenge” tiene lugar dos veces al año durante dos atardeceres en el verano boreal, y ya se apreció los pasados 30 y 31 de mayo.

 

El nombre “Manhattanhenge” proviene de la combinación de las palabras Manhattan y Stonehenge, el monumento megalítico situado en el sur de Inglaterra.

 

En Stonehenge, el sol atraviesa el eje de la construcción durante los solsticios de verano e invierno. En el caso de Manhattan, el fenómeno tiene lugar antes y después de los solsticios cuando al atardecer, antes de ocultarse, el sol se alinea entre los edificios de la Gran Manzana.