A pesar de haber sido el segundo país en América Latina con mayor contaminación del DNS Changer, México no sufrió afectaciones severas por el virus detectado en 2005 al cual la Oficina Federal de Investigación en Estados Unidos (FBI) le declaró la guerra.

 

Como informó 24 HORAS, miles de personas en todo el mundo, cuyas computadoras fueron infectadas hace más de un año por el virus informático, estaban en riesgo de quedarse sin conexión a internet desde la noche del domingo.

 

“México no fue muy afectado por el virus DNS Changer”, afirmó Dmitry Bestuzhev, director del equipo e investigación y análisis para América Latina de Kaspersky Lab en entrevista con este diario.

 

De acuerdo con el experto ruso, el país más afectado en Latinoamérica por el DNS Changer fue Colombia.

 

Aquí sí hubo afectaciones, sin embargo, este impacto fue reducido gracias al soporte técnico con el que los usuarios protegieron sus equipos:

 

“Esto se debió a que los usuarios tomaron conciencia de este problema y tomaron medidas de precaución, apoyados por el uso de antivirus y por el cambio a DNS temporales que limpió estas redes, lo que mantuvo funcionando estos equipos”, explicó.

 

El virus tomaba control de las máquinas, para poder ser manipuladas y redirigidas a direcciones no deseadas, lo que permitía a los intrusos reclamar compensaciones por el número de visitas. Ganaron con este programa malicioso más de 14 millones de dólares.

 

En noviembre de 2011, el FBI anunció la detención de sus creadores, seis estonios y un ruso. Al ser desconectados, todos los afectados perdieron acceso a internet.

 

Tras la operación, el FBI activó de manera temporal varios servidores que reconducían a una dirección segura a los equipos infectados, mismos que serían apagados ayer a las 04:01 GMT (11:00 pm del domingo en México).

 

Se calcula que más de 200 mil computadoras tenían la infección y se quedarían sin internet. Sin embargo, en México y en general a escala global, no se reportaron grandes afectaciones por este “apagón”.

 

“No hubo incidentes grandes ni afectaciones notables, excepto en el caso de Suecia, de acuerdo con reportes, fue el país que más sufrió las consecuencias de este cambio de servidores”, informó Bestuzhev.