Lima. El Gobierno peruano invertirá cerca de 50 millones de soles (18,65 millones de dólares) en una estrategia para luchar contra el narcotráfico en el VRAE, su mayor valle cocalero, anunció hoy el presidente del Consejo de Ministros, Óscar Valdés.

 

“Mañana comienza una nueva etapa en el VRAE, en el cual hemos definido cuatro ejes de trabajo: el primero enfocado a luchar contra la pobreza y acercar al Estado y a la empresa privada para sacar productos alternativos al mundo, (además) la lucha contra la desigualdad social, contra remanentes del terrorismo y contra el tráfico ilícito de drogas y el crimen organizado”, declaró Valdés a los periodistas.

 

Tras la clausura de una reunión internacional antidrogas en Lima, Valdés indicó que se nombrará como comisionado de la estrategia en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE) a Luis Rojas Merino, quien tendrá un nivel de ministro de Estado.

 

El jefe de Gabinete dijo que el Gobierno es “consciente del problema que vive” y, por ese motivo, tiene clara su tarea en la lucha contra las drogas y el narcotráfico, sobre todo en los territorios que comprenden el VRAE, comprendidos entre las regiones Cuzco, Ayacucho, Junín y Apurímac.

 

Perú es considerado uno de los primeros productores de cocaína en el mundo -el primero según el Departamento Estadounidense Antidrogas (DEA)- junto a Colombia.

 

Según un informe de la UNODC de 2011, de las 61.200 hectáreas de cultivos de coca, principal insumo de la cocaína, que existen en el Perú, 19.723 hectáreas corresponden al VRAE.

 

El VRAE se encuentra en una región selvática de muy difícil acceso, donde opera un grupo armado conformado por una facción de exintegrantes del grupo terrorista Sendero Luminoso aliada con el narcotráfico.