El abanderado de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Movimiento Ciudadano reiteró que el candidato de los que no quieren el cambio en el país es el priista Enrique Peña Nieto.
“No va a haber problema con el resultado de las elecciones, se va a ganar bien, todo indica que no va a ser cerrada, va a ser claro, ya se percibe y ya se siente, vamos bien, la estrategia es la correcta”, afirmó.
El ex jefe de gobierno capitalino también se declaró preparado para enfrentar el segundo debate, organizado por el Instituto Federal Electoral (IFE) para el domingo 10, en el cual, dijo, presentará propuestas para que las conozca la gente y sepa por dónde va su intención de gobierno.
“Estoy optimista, el 1 de julio por la noche va a haber fiesta cívica nacional porque entre todos los mexicanos vamos a iniciar la transformación de México, estamos bien y de buenas”, juzgó.
El aspirante presidencial señaló que en una encuesta realizada el fin de semana pasado por miembros de su equipo él se ubica arriba en las preferencias de la gente con 28 por ciento, dos puntos arriba de Enrique Peña Nieto y 11 por encima de Josefina Vázquez Mota.
Por lo anterior, reiteró que se está cayendo el candidato de la coalición Compromiso por México, integrada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde Ecologista de México (PVEM).
“Después del primer debate medimos, como lo venimos haciendo desde hace tres años, y nos dio datos de que estábamos cuatro puntos debajo de Peña Nieto, pero el pasado fin de semana volvimos a medir y ayer que me entregaron los resultados observamos que ya estamos arriba del candidato del PRI por dos puntos porcentuales”, explicó.
López Obrador se comprometió a entregar dicha encuesta a los medios de comunicación a más tardar el próximo sábado, ya que recordó que la noche de ayer hizo un compromiso con una empresa de televisión para entregarles el citado sondeo.