Tras confirmar que la transformación de la Policía Federal concluyó después de un proceso que tomó cinco años, el presidente Felipe Calderón reconoció que se trata de un paso más para que en el mediano plazo las Fuerzas Armadas abandonen en su totalidad los trabajos de seguridad pública en zonas de alta incidencia.

 

Luego de que el viernes pasado se puso en marcha la División Científica de la referida corporación, la últimas de las seis que la conforman, el primer mandatario advirtió que se cuenta ahora con una policía bien preparada, equipada, concentrada en la investigación y en la inteligencia, y que en consecuencia tiene el poder y la capacidad para enfrentar a los criminales.

 

“Tenemos una policía que además posibilitará que en el mediano plazo la generosa y esforzada labor de nuestras Fuerzas Armadas pueda ser verdaderamente sustituida en esencia por cuerpos civiles, que son los que primordialmente están encargados, o deben de estarlo, de la seguridad de los ciudadanos”, señaló Calderón.

 

Al hacer un breve recuento de la forma en cómo se ha transformado la corporación que dirige Genaro García Luna, puso como ejemplo su estado de fuerza, el cual era de sólo seis mil elementos a finales del año 2006, mientras que actualmente suman ya cerca de 37 mil, todos con los controles de confianza superados.

 

Del total del estado de fuerza, destacó que hay 8 mil 600 policías federales con las capacidades y el marco legal suficiente para realizar labores de investigación a profundidad, mientras que 650 tienen una alta preparación científica, muchos a nivel de postgrado y doctorado, para operar los distintos laboratorios de la institución y desarrollar labores de inteligencia.

 

“Este modelo policial, compuesto por muchos jóvenes de tan alta experiencia, es el que debe ser replicado por las corporaciones de todo el país; se trata de la esperanza de que es posible tener un México más seguro, más justo y más próspero, porque hemos estado trabajando desde el primer día de mi gobierno”, dijo el Presidente.

 

La comisionada de la Policía Federal, Maribel Cervantes Guerrero, oficializó la operación al 100% de las seis divisiones que conforman la corporación: Inteligencia, Investigación, Seguridad Regional, Antidrogas, Fuerzas Federales y Científica.

 

Estas divisiones fueron concebidas a partir del plan para consolidar el “Nuevo Modelo Policial”, cuyos pilares son la estrategia e inteligencia, reingeniería de métodos, nuevo perfil de policías, tecnología de vanguardia, control de confianza y desarrollo de la carrera policial.

 

A la par de este desarrollo, la Policía Federal ha experimentado un incremento notable en su infraestructura, con la construcción del Centro de Mando en la delegación Iztapalapa y de 15 centros regionales en todo el país.

 

A esto se suma la puesta en marcha de su Centro Nacional de Evaluación, en el que se han practicado 390 mil evaluaciones de control de confianza, cada una de las cuales incluye pruebas de conocimientos, toxicológicas, de entorno social, psicometrías, de polígrafo, y de estado físico.

 

La base de datos federal denominada Plataforma México fue otro de los ejes que Cervantes consideró como fundamentales en la transformación de la policía, pues recordó que se trata del banco de información anticrimen más grande de América Latina, con más de 490 millones de registros.

 

Aeronaves no tripuladas, helicópteros tipo Black Hawk, vehículos blindados, equipos de revisión láser y de rayos X, más y mejor armamento, son otras innovaciones de la Policía Federal, cuya nueva ley aprobada en el 2010 le permitió incrementar su espectro de capacidades.