El número de nacimientos por cesárea en México supera el porcentaje permitido por la Organización Mundial de la Salud y la Norma Oficial Mexicana NOM 007-SSA2-1993. En nuestro país ocho de cada 10 niños llegan al mundo por medio de esta cirugía, cuando el límite permitido es 20% del total de alumbramientos.

 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) así como la Norma Oficial Mexicana NOM 007-SSA2-1993 informan que de los nacimientos totales sólo debe practicarse 15% por cesárea. Y la norma oficial mexicana indica que en los hospitales de tercer nivel el porcentaje tolerado puede ser de hasta 20% debido a la atención de embarazos de alto riesgo.

 

Pero el número de estas cirugías en nuestro país llegó a 36% en la última década. En el sector público el porcentaje de cesáreas llegó a 50% y en los hospitales privados alcanza 90%. México no es el único país en rebasar esta media permitida, a nivel mundial también se ha excedido la medida recomendada por la OMS, ya que el promedio de nacimientos por esta vía es de 80%.

 

La razón de que en las clínicas privadas el número de cesáreas sea mayor obedece a una cuestión económica; ya que el parto natural requiere un médico, enfermera y pediatra, un día de hospitalización y hasta 10 horas de trabajo de parto.

 

En cambio, la cesárea requiere hasta tres días en el nosocomio, además de un quirófano y un anestesiólogo, lo que incrementa los costos. Además, las aseguradoras sí tienen paquetes para esta cirugía, pero no para un parto.

 

Los factores culturales también han influido. “Las mujeres ya no quieren la labor de parto, le tienen miedo a que el bebé salga por el canal vaginal y prefieren programar su operación. Para los médicos también es más fácil porque no tienen que esperar hasta 10 horas”, aseguró Carlos Vargas García, director del Centro de Investigación Materno Infantil.

 

El estudio Operación Cesárea, una perspectiva Integral, del Hospital General Manuel Gea González apunta que las cesáreas responden a la práctica de la medicina defensiva, debido al aumento de demandas judiciales por mal resultado neonatal. Por lo tanto, prefiere tomar una decisión “segura” y evitar el “riesgo” que pudiera tener un parto vaginal.

 

Sin embargo, los riesgos y las contraindicaciones surgen precisamente en la cirugía. La OMS ha demostrado que las cesáreas requieren, en gran medida, el uso de antibióticos después del parto para prevenir infecciones en el abdomen.

 

La recuperación es más lenta, la cicatrización de la herida tarda más y tarda hasta tres días en abandonar el hospital. También puede presentar problemas de depresión porque no quedó satisfecha con su labor de parto, tiene dificultad para la lactancia, y esto puede generar problemas en el entorno familiar.

 

Además, la morbilidad y mortalidad materna, así como la mortalidad neonatal y la permanencia del recién nacido en terapia intensiva, están directamente relacionadas con el abuso de esta cirugía.

 

“A pesar de esto, los médicos ya no prefieren el parto, a pesar de que es lo que la naturaleza indica. Incluso si la mujer tuvo a su primer hijo por cesárea, si el bebé es muy grande o con el cordón umbilical enredado puede haber parto natural”, indicó Vargas García.

 

 

NACIMIENTOS

 

2 millones de nacimientos anualmente en México

 

400 mil de ellos son por vía natural

 

1.6 millones de niños por cesárea

 

 

Cuánto cuesta

 

30 mil pesos por parto natural

 

35 mil pesos el nacimiento por cesárea