Los tarahumaras o rarámuris como ellos mismos se identifican viven en las regiones inhóspitas de Chihuahua porque la invasión a sus tierras los ha orillado a tomar esa decisión. Actualmente la comunidad es desplazada de su territorio por los terratenientes y el narcotráfico, explicó Juan Arturo León López, profesor investigador del Posgrado en Desarrollo Rural de la Universidad Autónoma Metropolitana.

 

“Los mestizos han invadido sus tierras. Ellos consideraban todo como terreno propio y si hoy viven en las zonas inhóspitas es por las invasiones”, aseguró el investigador, que ha vivido con grupos indígenas del norte del país.

 

Los lugares que actualmente habitan los tarahumaras son considerados como sagrados por la relación que establecían con la naturaleza. Pero ahora tienen que vivir en ellos y acostumbrarse a las inclemencias del tiempo, la falta de caminos y la inseguridad de la región.

 

Si bien las condiciones actuales y la culturalización agresiva que enfrentan los obligan a aislarse dentro de la región para no enfrentarla, esto no significa que este grupo indígena aguante la situación de hambruna, sequía y heladas que están viviendo en estos momentos, como lo expresó el gobernador de Chihuahua, César Duarte.

 

El pasado fin de semana el mandatario de la entidad, señaló que la comunidad tarahumara está acostumbrada a las inclemencias del clima y a enfrentar situaciones extremas, como las que viven actualmente.

 

“No es por voluntad. El moverse de sus tierras ha sido una manera de defender lo que son y lo que quieren ser, por eso expulsan a los blancos y no se unen a las poblaciones”, explicó el investigador.

 

Las invasiones y los desplazamientos voluntarios, relata el investigador de la UAM, les han quitado tierras y fuentes de trabajo, situación que orilla a los hombres a dejar sus casas para trabajar en la pizca de manzana del municipio de Cuauhtémoc, donde ganan 120 pesos al día. A pesar de esta situación, los tarahumaras no han podido defender su territorio porque no son una sociedad unificada.

 

“No hay pueblos como en el sur. Allá los núcleos son de cuatro o cinco familias que trabajan y viven en un espacio concreto, cada uno autónomo y tienen un líder. Esto los debilita porque no pueden generar una defensa masiva como en el sur”, indicó León López.

 

Los tarahumaras son uno de los grupos indígenas que preserva casi todas sus tradiciones, incluyendo su religión. El investigador destacó que, aunque la mayoría se convirtió al catolicismo, mantienen sus ritos y dioses a través de las fiestas y santos de esa religión.

 

 

 

Tarahumara o rarámuri

 

 

Los tarahumaras se llaman a sí mismos rarámuris que significa corredores a pie. Para ellos es sinónimo de las personas o los humanos. A los mestizos en general se les designa con el término chabochi, que significa los que tienen barbas, y a los que conviven con ellos y comparten su cultura les llaman napurega rarámuri.

 

FUENTE: Coordinación Estatal de la Tarahumara. Gobierno de Chihuahua