El senador panista Guillermo Anaya insistió en que la liberación de Javier Villareal, ex tesorero de Coahuila, es un hecho que tiene detrás al líder nacional del PRI, Humberto Moreira, pues tras el pago de la fianza pretende que se no se le juzgue en la Procuraduría General de la República, sino en Coahuila, para que el ex gobernador de dicha entidad haga un juicio a modo.

 

Anaya señaló en entrevista en MVS Radio que las averiguaciones de la PGR tendrán que seguir su curso para llevar el proceso a tribunales federales. Aseguró que la deuda que dejó el ex gobernador Humberto Moreira se encuentran en su mayoría invertida con prestanombres en inmuebles y gasolineras en San Antonio Texas.

 

El legislador blanquiazul dijo que la deuda de cerca de 34 mil millones de pesos, ahora asciende a 50 mil millones de pesos y no será hasta dentro de dos años que se sepa, a través de las entidades bancarias, bajo qué criterios fue recontratada la deuda. Mencionó que se ha solicitado la ayuda de la Comisión Nacional Bancaria para saber si es que dicho adeudo puso en riesgo alguna institución pública.

 

Javier Villarreal Hernández, tesorero de Coahuila durante el gobierno de Humberto Moreira, salió bajo fianza la madrugada del sábado de un penal de  Saltillo tras pagar una fianza de alrededor de 10 millones de pesos.

 

El ex funcionario fue detenido el viernes por agentes de la Fiscalía General de Coahuila en el aeropuerto Plan de Guadalupe procedente de la Ciudad de México; en agosto pasado fue removido del cargo tras ser denunciado por  falsificación de documentos  y simulación de actos jurídicos que derivó en el sobreendeudamiento de más de 34 mil millones de pesos.

 

Coahuila es el Estado que más deuda por habitante tiene en el país; su promedio es cuatro veces mayor al nacional. De acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda, las obligaciones financieras de Coahuila pasaron de 323 millones de pesos en 2005, a ocho mil 451 millones de pesos a junio de 2011.

 

El ex gobernador de la entidad y actual líder nacional del PRI, Humberto Moreira, así como su hermano Rubén –quien es el gobernador electo de Coahuila–, consideran que las críticas sobre la deuda del estado es mera cuestión partidista. “La deuda pública de Coahuila está siendo usada como un instrumento político para golpear”, dijo el pasado martes el dirigente nacional.