WASHINGTON. El plan del candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, de moderar su controvertido programa migratorio para acercarse a los votantes hispanos sigue sumido en la confusión, debido a continuos cambios de tono, cancelaciones y contradictorias declaraciones en su intento de reconciliarse con la comunidad hispana.
 
De hecho, y pese a sus frontales críticas al presidente de EU, el demócrata, Barack Obama, aplaudió parte de la política del actual Gobierno.
 
“Lo que la gente no sabe es que Obama sacó un gran número de gente del país. (El presidente George W.) Bush, lo mismo. Mucha gente fue deportada del país con las leyes existentes. Pues bien, yo voy a hacer lo mismo”, dijo Trump en un raro reconocimiento de Obama, al que ha calificado con anterioridad como el peor Presidente de la historia del país.
 
Estas declaraciones se suman a las pronunciadas por su recién nombrada nueva jefa de campaña, Kellyanne Conway, quien dejó el domingo en el aire el controvertido plan de deportación de los 11 millones de indocumentados que viven en EU como aún “por determinar”, y señaló que el candidato republicano ofrecería más detalles “en las próximas semanas”.
 
En un nuevo giro, el candidato republicano anunció que estaría ayer por la noche en Austin (Texas).
 
“Ahora estoy en Texas en un gran acto de recaudación de fondos para el Partido Republicanos y un especial con Fox News sobre la frontera y con víctimas del crimen fronterizo”, afirmó el magnate en su cuenta de la red social Twitter.
 
El multimillonario también tiene previsto asistir, entre hoy y el miércoles, a un foro en la también ciudad tejana de San Antonio, organizado por la Fox, en el que hablará de inmigración ilegal y seguridad fronteriza.
 
Varios sondeos nacionales sitúan a Trump hasta 60 puntos por debajo de la candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, en intención de voto entre los hispanos, cuyo creciente peso demográfico hace que su apoyo sea vital para vencer en estados fundamentales en las elecciones de noviembre próximo.
 
Voto latino
 
30% de los votantes hispanos no se identifica ni como demócrata ni republicano, lo cual, señaló, es una “oportunidad” para que los candidatos, el republicano, Donald Trump, y la demócrata, Hillary Clinton según un estudio de la consultora Nielsen.